México es el país de las elecciones eternas. En lo que concluye una jornada electoral se gesta la siguiente. Así funciona la democracia mexicana y el próximo año habrán de medir nuevamente su fortaleza electoral los dos frentes ya bien definidos: por un lado, el que encabeza la Cuarta Transformación y los partidos aliados y, por el otro, la oposición cada vez más desgastada.
Los escenarios en donde se librarán las batallas son Coahuila y el Estado de México que renovarán gubernaturas y representan los últimos bastiones del otrora poderoso Partido Revolucionario Institucional. El EdoMex es la joya de la corona, pues cuenta con el padrón electoral más codiciado con casi doce millones y medio de electores. Estas elecciones despiertan el morbo político de propios y extraños al ser la antesala de la madre de todas las batallas que se llevará a cabo en el 2024.
Hay que reconocer que el inquilino de Palacio Nacional sabe ganar elecciones e imponer la agenda mediática. Desde el 2018 hasta el día de hoy, su movimiento ha ganado 20 estados, gobernando así a más de la mitad de la población de nuestro país, esto, sin considerar a las entidades en donde gobiernan sus aliados, es decir: Morelos con el Partido Encuentro Social y San Luís Potosí con el Verde Ecologista.
Es por esto que no es ninguna ocurrencia que diversos analistas políticos den por sentado que MORENA rentendrá el poder ejecutivo federal por seis años más y es sencillo vaticinarlo al tener en el panorama a una oposición que, de opositora, sólo tiene el nombre y de momento no cuenta con ningún cuadro de peso que le haga frente a cualquier perfil morenista, entre los que sobresalen por su activismo político Marcelo Ebrard, Adán Augusto y Claudia Sheinbaum.
Sin duda alguna, el mejor posicionado al día de hoy es el canciller Marcelo Ebrard Casaubón, que en el Gobierno de la 4T ha desempeñado un papel sobresaliente más a manera de lo que hace un Vicepresidente en otros países. De 2006 a 2012 fue Jefe de Gobierno del DF en donde se destacó por una agenda progresista, en particular en cuanto al matrimonio igualitario, la interrupción legal del embarazo y la ley de voluntad anticipada. De momento, dentro de los “candidateables” no existe uno solo que pueda presumir de una verdadera agenda de izquierda como puede hacerlo él.
Aunque Durango representa escaso valor electoral por sus números en cuanto al padrón, es uno de los estados norteños en donde mejor se le ha promocionado al canciller, destacando que se encuentra en color rojo por el nulo desempeño que han tenido los candidatos en el 2019 y en la elección próxima pasada.
Aquí su principal enlace y operador político es el Lic. Ignacio “Nacho” Aguado, delegado de la Secretaría de Relaciones Exteriores, quien asegura que Marcelo Ebrard representa “concordia política y social” y será a través de la organización Avanzada Nacional desde donde pretenden consolidar el proyecto Ebradista en Durango, responsabilidad que recaerá en el propio Nacho y en Carlos Ramírez.
Aún falta tiempo y será materia de futuras colaboraciones el análisis a conciencia de cada uno de los perfiles que pretenden remplazar a López Obrador en la máxima magistratura del país.
EN EL TINTERO… Vaya desorden que se ha generado en el gobierno saliente de Aispuro. La paralización de las oficinas gubernamentales de parte del sindicato de los tres `poderes es sólo una de las tantas crisis que se vislumbran… Castigaron a los Alacranes de Durango con el juego a puerta cerrada porque no se ha cumplido en tiempo y forma en las mejoras al estadio con las que se comprometió Aispuro. Difícil el panorama y la crisis que heredará a Esteban Villegas Villarreal. Tanto que se quejaron de Jorge Herrera Caldera.
@raulgonzalezr