El Día Internacional de la Mujer se conmemora cada año el ocho de marzo.
No es un día para festejar, es una ocasión para reflexionar sobre los avances y los muchos cambios que aún se requieren, pero, sobre todo, para recordar la valentía de las mujeres que han jugado un papel decisivo en la historia de la humanidad y en particular, en la historia por la lucha de sus derechos.
Es cierto que ha habido avances, sin embargo, no se puede afirmar que algún país haya alcanzado la igualdad de género. De hecho, no existe uno solo en el mundo en el que las mujeres disfruten de las mismas oportunidades que los hombres. Aún existen numerosas restricciones legales que, según datos proporcionados por las Naciones Unidas, impiden a 2 mil 700 millones de mujeres acceder a las mismas opciones y condiciones laborales que los hombres. Al día de hoy, una de cada tres mujeres sigue sufriendo violencia de género.
Por seguir citando algunas cifras que evidencian que el 8 de marzo no es un día de celebración, sino de lucha, alrededor del 50 por ciento de las mujeres del mundo tiene un empleo remunerado, sin embargo, ganan entre un 10 y un 30 por ciento menos que los hombres por realizar el mismo trabajo. En México, sólo el 16% de los puestos en los consejos directivos es ocupado por mujeres. Las mujeres mexicanas representan, de acuerdo al CONAPO, alrededor del 52% de la población, pero sólo ocupan una de cada tres curules en el Congreso de la Unión, la cuarta parte de los congresos locales, la quinta parte de los cargos de jueces y magistrados federales y apenas un 7% de las presidencias municipales. Por si fuera poco, cinco millones de personas son víctimas de trata, y el 98% son mujeres y niñas.
El discurso ha cambiado, pero en los hechos aún falta mucho por avanzar. Irónicamente, al día de hoy, al igual que en la década de 1910 con el movimiento sufragista inglés, el lema de lucha podría seguir siendo: “Hechos, no palabras”. Es por eso que esta fecha es para enfocarnos en la reivindicación de sus derechos, lucha que lleva más de 300 años y que parece lejos de terminar.
Hay quienes aún se atreven a juzgar a los colectivos de mujeres que protestan de manera “radical”, cuando el radicalismo es la única manera de tratar de cimbrar un sistema caracterizado por las brechas de desigualdad entre hombres y mujeres, teniendo como los más graves, los feminicidios y la violencia de género.
Sin este tipo de “radicalismos” jamás se le daría la importancia que tiene. Sucedió recientemente en Durango, cuando a las afueras de la Catedral apareció una lona con la leyenda “Saquen sus doctrinas de nuestras vaginas”. Más radical ha sido la manera en que las mujeres han sido mancilladas, denigradas y asesinadas, por el simple hecho de ser mujeres.
EN EL TINTERO… Danielo Hernández se posiciona como el más fuerte aspirante de MORENA para abanderar el quinto distrito local. Hay quienes señalaban como su debilidad el territorio, ahora, parece que es más su fortaleza… Excelente colaboración de la maestra Maricruz Ocampo, activista de los derechos de las mujeres y la conducción de Arlyn Herrera con los Parroquianos del Cabaret. Vale la pena ver una y otra vez el programa para dimensionar la importancia del 8 de marzo. Enhorabuena… El Hospital de Salud Mental celebrará su 35 aniversario con un ciclo virtual de conferencias denominado “Entre la vida, la muerte y la mente”. Se llevarán a cabo los días 11 y 12 del presente mes. Felicidades a los compañeros trabajadores por la labor que realizan con tan poco, así como a los usuarios.
@raulgonzalezr
