/ sábado 6 de noviembre de 2021

Aspiración legítima

Pancho Villa solía expresar lo siguiente: “Es justo que todos aspiremos a ser más, pero también que todos nos hagamos valer por nuestros hechos.”

Azucena Triana Martínez, fiel a sus convicciones y a su historia personal, revive ese pensamiento villista para hacerlo una realidad; ella es una durangueña de amplia experiencia y reputación en la política local y nacional, que recientemente ha manifestado su legítima aspiración por gobernar Durango, porque está convencida de que la equidad política también debe permear las intrincadas esferas de la justicia de género, además de brindar el reconocimiento a la mujer, porque más allá de ser una cuestión de equidad, representa un principio de cambio social y político que necesariamente debe contribuir a una mejor sociedad.

En ese tenor, se prepara para transitar en los vericuetos de la política local en Durango, con la pretensión de alcanzar la candidatura a la gubernatura por Durango por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), aspiración que antaño se antojaba temerario por las implicaciones machistas, de una sociedad que paulatinamente ha cambiado su manera de ser y de pensar.

Su padre, Federico Triana Alonso, fue un hombre de libre pensamiento y reconocido liberal durangueño, que supo trazar en ella, una valiosa herencia moral y educativa, que el día de hoy, es la divisa que porta con orgullo Azucena, porque como mujer, experimentó con éxito diversas responsabilidades desde su juventud, algunas que como ser humano se encomendó de manera personal, sumadas a otras, confiadas por la política y la función pública.

Azucena, forma parte del orgullo guinda de Durango, fue una consumada deportista egresada del Instituto Tecnológico de Durango, que en su tiempo le dio prestigio al ITD, sumado a que, en el desempeño en sus funciones, siempre benefició a su Alma Mater, y de ello hay testimonio; de igual manera es una estupenda socióloga, con maestría en sociología, egresada de la Universidad Iberoamericana de la Ciudad de México.

Su talento y eficacia en las distintas responsabilidades desempeñadas a lo largo de su carrera como funcionaria, publirrelacionista y política, la ha hecho reflexionar, que ha llegado el momento de sumar su aspiración rumbo a la gubernatura de Durango para el próximo 2022.

He tratado de manera personal a Azucena Triana, y he constatado su profundo amor por Durango, y lo constaté observando su fiel desempeño cuando representó al gobierno de Durango en la Ciudad de México, su fino trato y empatía con funcionarios públicos federales, así como embajadores y cónsules de diferentes países latinoamericanos y europeos, le generó a Durango y a su gente, una excelente carta de presentación.

Pancho Villa solía expresar lo siguiente: “Es justo que todos aspiremos a ser más, pero también que todos nos hagamos valer por nuestros hechos.”

Azucena Triana Martínez, fiel a sus convicciones y a su historia personal, revive ese pensamiento villista para hacerlo una realidad; ella es una durangueña de amplia experiencia y reputación en la política local y nacional, que recientemente ha manifestado su legítima aspiración por gobernar Durango, porque está convencida de que la equidad política también debe permear las intrincadas esferas de la justicia de género, además de brindar el reconocimiento a la mujer, porque más allá de ser una cuestión de equidad, representa un principio de cambio social y político que necesariamente debe contribuir a una mejor sociedad.

En ese tenor, se prepara para transitar en los vericuetos de la política local en Durango, con la pretensión de alcanzar la candidatura a la gubernatura por Durango por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), aspiración que antaño se antojaba temerario por las implicaciones machistas, de una sociedad que paulatinamente ha cambiado su manera de ser y de pensar.

Su padre, Federico Triana Alonso, fue un hombre de libre pensamiento y reconocido liberal durangueño, que supo trazar en ella, una valiosa herencia moral y educativa, que el día de hoy, es la divisa que porta con orgullo Azucena, porque como mujer, experimentó con éxito diversas responsabilidades desde su juventud, algunas que como ser humano se encomendó de manera personal, sumadas a otras, confiadas por la política y la función pública.

Azucena, forma parte del orgullo guinda de Durango, fue una consumada deportista egresada del Instituto Tecnológico de Durango, que en su tiempo le dio prestigio al ITD, sumado a que, en el desempeño en sus funciones, siempre benefició a su Alma Mater, y de ello hay testimonio; de igual manera es una estupenda socióloga, con maestría en sociología, egresada de la Universidad Iberoamericana de la Ciudad de México.

Su talento y eficacia en las distintas responsabilidades desempeñadas a lo largo de su carrera como funcionaria, publirrelacionista y política, la ha hecho reflexionar, que ha llegado el momento de sumar su aspiración rumbo a la gubernatura de Durango para el próximo 2022.

He tratado de manera personal a Azucena Triana, y he constatado su profundo amor por Durango, y lo constaté observando su fiel desempeño cuando representó al gobierno de Durango en la Ciudad de México, su fino trato y empatía con funcionarios públicos federales, así como embajadores y cónsules de diferentes países latinoamericanos y europeos, le generó a Durango y a su gente, una excelente carta de presentación.