Redes sociales
Se discute actualmente sobre la regulación de las redes sociales, tema muy importante debido a que está de por medio la libertad de expresión y el derecho de acceso a la información, por lo que los órganos legislativos deben ser muy cuidadosos y propiciar un debate amplio e incluyente para tomar la mejor decisión.
Diariamente, millones de personas hacemos uso de internet y de las redes sociales. En el Informe digital de México realizado por el centro de investigación iLifebelt, se hace mención que 89 millones de personas tenemos acceso a internet y que la plataforma más usada en las redes sociales es Facebook con alrededor de 78 millones de usuarios, seguida de Instagram, Linkedin y Twitter.
Se utilizan a las redes sociales, en términos positivos, por ejemplo, para entablar comunicación, para obtener información de lo que está aconteciendo no sólo en nuestro entorno próximo, sino a nivel mundial, como instrumento de aprendizaje y enseñanza, así como para promocionar productos; pero, también, hay aspectos negativos como noticias falsas y agresiones verbales en contra de algunas personas, entre otros.
Ante este panorama, previo a adoptar una postura sobre la regulación de las redes sociales, convendría meditar sobre los motivos que impulsan a legislar sobre ese tema, pero también sobre las consecuencias que tendría sobre las libertades y los derechos.
Para formar nuestro criterio, es conveniente saber lo que acontece en otros países con la libertad en internet, con la democracia y con los derechos humanos, sobre todo ahora, en época de pandemia.
En la evaluación que presentó Freedom House: “Libertad en la Red 2020”, advierte que hay retrocesos. Muchos gobiernos en el mundo han aprovechado la situación de pandemia para “expandir la vigilancia en línea y la recopilación de datos, censurar el discurso crítico y construir nuevos sistemas tecnológicos de control social”.
Se pone énfasis en que la “soberanía cibernética” va en aumento y que para ello se ha utilizado a la legislación, tal como sucede en Rusia, quien aprobó una legislación para aislar al país de internet global en los periodos de emergencia. Pero considera que el país que más ha restringido la libertad de internet es China.
A nuestro país lo considera como un ambiente peligroso para periodistas y blogueros y un lugar en donde las autoridades utilizan perfiles progubernamentales para manipular las discusiones en la red.
Considero que la iniciativa que presentó el partido oficialista en México fue un tanto apresurada y que el tema de las redes sociales que pretenden regular, debe generar un debate amplio e incluyente, en el que se tenga como premisas básicas la libertad de expresión y el acceso a la información.