/ domingo 21 de julio de 2024

Dar la espalda a la fiera

Fue un 7 de febrero del 2013, en Hermosillo, Sonora, en la función nocturna del circo "Hermanos Suárez". El domador Alex Crispín Suárez, oriundo de los Estados Unidos y de 35 años de edad, realizaba el acto circense en el que domaba a dos tigres, de pronto éste dio dos vueltas a las fieras y una de estas, el tigre ‘Sergio’, tiró un zarpazo que lo desvistió y tiró al piso, para después halarlo a sus fauces y garras para continuar el ataque hasta matarlo. “Dar la espalda a la fiera y tropezar frente a ella, fueron los dos principales errores que cometió el domador” comentó Francisco González, encargado del área de felinos del Centro Ecológico de Sonora con gran experiencia en el manejo de fieras salvajes.

Cuando Hitler asumió “tímtidamente” el poder como canciller del gobierno alemán a principios de los años treinta del siglo pasado, venía de escribir su libro titulado “Mi lucha” el cual llegó a ser “la biblia” de la Alemania Nazi. Muchos de los que subestimaron las ideas antisemitas que se esgrimían allí, fueron los mismos que se sorprendieron, ya terminada la segunda guerra mundial, del horror al que su “fuhrer” fue capaz de llevarlos: “le dieron la espalda a la bestia, pretendieron ignorar su potencial salvaje; y luego, por si fuera poco, ya en el suelo, sucumbieron a su fiereza”.

Seiscientos años A.C. el profeta Daniel nos advierte acerca de la naturaleza “bestial” de los poderes de este mundo: “ . . . vi una tempestad que agitaba la superficie de un mar grande, con vientos fuertes soplando de todas direcciones. Del agua surgieron cuatro bestias enormes . . .la primera bestia era como un león con alas de águila . . . una segunda bestia que se parecía a un oso. . . la tercera de estas extrañas bestias y se parecía a un leopardo . . . vi a una cuarta bestia, aterradora, espantosa y muy fuerte . . . y tenía diez cuernos. (Daniel 7:2-7)

La famosa máxima de Lord Acton, «el poder tiende a corromper, el poder absoluto corrompe absolutamente» viene a sintetizar lo que la historia nos confirma: si dejamos de “vigilar” a la bestia y nos tropezamos frente a ella vamos a “sucumbir” a su “hambre” de poder. México nos necesita.


leonardolombar@gmail.com

Fue un 7 de febrero del 2013, en Hermosillo, Sonora, en la función nocturna del circo "Hermanos Suárez". El domador Alex Crispín Suárez, oriundo de los Estados Unidos y de 35 años de edad, realizaba el acto circense en el que domaba a dos tigres, de pronto éste dio dos vueltas a las fieras y una de estas, el tigre ‘Sergio’, tiró un zarpazo que lo desvistió y tiró al piso, para después halarlo a sus fauces y garras para continuar el ataque hasta matarlo. “Dar la espalda a la fiera y tropezar frente a ella, fueron los dos principales errores que cometió el domador” comentó Francisco González, encargado del área de felinos del Centro Ecológico de Sonora con gran experiencia en el manejo de fieras salvajes.

Cuando Hitler asumió “tímtidamente” el poder como canciller del gobierno alemán a principios de los años treinta del siglo pasado, venía de escribir su libro titulado “Mi lucha” el cual llegó a ser “la biblia” de la Alemania Nazi. Muchos de los que subestimaron las ideas antisemitas que se esgrimían allí, fueron los mismos que se sorprendieron, ya terminada la segunda guerra mundial, del horror al que su “fuhrer” fue capaz de llevarlos: “le dieron la espalda a la bestia, pretendieron ignorar su potencial salvaje; y luego, por si fuera poco, ya en el suelo, sucumbieron a su fiereza”.

Seiscientos años A.C. el profeta Daniel nos advierte acerca de la naturaleza “bestial” de los poderes de este mundo: “ . . . vi una tempestad que agitaba la superficie de un mar grande, con vientos fuertes soplando de todas direcciones. Del agua surgieron cuatro bestias enormes . . .la primera bestia era como un león con alas de águila . . . una segunda bestia que se parecía a un oso. . . la tercera de estas extrañas bestias y se parecía a un leopardo . . . vi a una cuarta bestia, aterradora, espantosa y muy fuerte . . . y tenía diez cuernos. (Daniel 7:2-7)

La famosa máxima de Lord Acton, «el poder tiende a corromper, el poder absoluto corrompe absolutamente» viene a sintetizar lo que la historia nos confirma: si dejamos de “vigilar” a la bestia y nos tropezamos frente a ella vamos a “sucumbir” a su “hambre” de poder. México nos necesita.


leonardolombar@gmail.com

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