/ jueves 26 de mayo de 2022

Decisiones políticas con soporte técnico

En tiempos del proceso democrático de 2022 en que se renovará el Gobierno del Estado y los 39 ayuntamientos, el Instituto de Evaluación de Políticas Públicas del Estado de Durango (Inevap) conmemoró su 6° aniversario con la conferencia magistral, “La Importancia de la Evaluación de las Políticas Públicas” impartida por Guillermo Cejudo. Especialista del CIDE y CONEVAL reconocido internacionalmente por su trabajo en el BID y Banco Mundial.

El conferencista abordó un tema toral en el quehacer del Inevap que desde 2021 transita por su etapa de consolidación, teniendo como eje cardenal el Plan Institucional de Desarrollo 2022 con visión 2030. Aspectos fundamentales no sólo para los involucrados en la evaluación de políticas públicas, sino para todo aquel que se preocupa de que los recursos públicos se ejerzan de mejor manera, desde el ciudadano hasta gobernadores, presidentes municipales y legisladores. Los principales puntos que compartió se enfocaron en la relación entre las decisiones políticas y las técnicas; la utilidad de la evidencia y la información; y los pasos necesarios para que las evaluaciones incidan en políticas con mejores resultados.

Del primer punto, destaca que la evaluación es crucial y necesaria en una democracia, precisamente porque las políticas públicas surgen en un ambiente democrático. Hay que reconocer que en una democracia los gobernantes que elegimos son quienes toman las decisiones políticas. Las preguntas sobre cuál problema resolver, cuáles programas crear o cuál población atender, siempre serán una decisión política, porque los políticos son quienes tienen la legitimidad democrática.

La ciudadanía los eligió para ello. Pero, para que las decisiones políticas generen mejores resultados, deben estar informadas por las decisiones técnicas y, desde un punto de vista amplio, es un ganar-ganar para ambas partes ya que, si hay mejores políticas públicas, redituará en mayor beneficio político.

El trabajo realizado por Inevap fomenta un diálogo entre las decisiones técnicas y las políticas y así el Instituto contribuye a que las políticas públicas alcancen sus objetivos de mejor manera. La lógica técnica, la política no van en sentido contrario. Es necesario generar las condiciones para que ambas posturas se puedan entender.

De la segunda vertiente destaco que la evidencia es fundamental para definir los problemas públicos y las mejores alternativas de solución. En ese sentido, la evaluación no es una etapa aislada que ocurre al final de una política o un programa público, sino que debe incidir desde el diseño donde se plantean los problemas y se discuten las alternativas, incluso para tener buenos diagnósticos; en otras palabras, también a través de la evaluación se genera información útil para quienes toman decisiones dentro de los gobiernos.

Actualmente las políticas públicas generan información y están abiertas para los ciudadanos. Gracias a la normativa de transparencia se encuentra disponible información relevante como padrones de beneficiarios, indicadores, registros administrativos o datos abiertos. Este cúmulo de información es uno de los principales insumos para llevar a cabo evaluaciones con las cuales, la ciudadanía tendrá elementos para saber si se resuelven o no los problemas públicos y para conocer cómo funcionan los gobiernos.

Para cerrar su intervención, nuestro conferencista puntualizó que en el caso de la planeación del desarrollo es necesario se complemente con la lógica de la evaluación para conocer cómo se van alcanzando los objetivos planteados. Un buen plan no garantiza una buena implementación y debe ser lo suficientemente flexible para adecuarlo con la información que generan las evaluaciones.

Por último, es necesario reconocer que las políticas públicas siempre son perfectibles, es decir, siempre tienen un margen de mejora.

En tiempos del proceso democrático de 2022 en que se renovará el Gobierno del Estado y los 39 ayuntamientos, el Instituto de Evaluación de Políticas Públicas del Estado de Durango (Inevap) conmemoró su 6° aniversario con la conferencia magistral, “La Importancia de la Evaluación de las Políticas Públicas” impartida por Guillermo Cejudo. Especialista del CIDE y CONEVAL reconocido internacionalmente por su trabajo en el BID y Banco Mundial.

El conferencista abordó un tema toral en el quehacer del Inevap que desde 2021 transita por su etapa de consolidación, teniendo como eje cardenal el Plan Institucional de Desarrollo 2022 con visión 2030. Aspectos fundamentales no sólo para los involucrados en la evaluación de políticas públicas, sino para todo aquel que se preocupa de que los recursos públicos se ejerzan de mejor manera, desde el ciudadano hasta gobernadores, presidentes municipales y legisladores. Los principales puntos que compartió se enfocaron en la relación entre las decisiones políticas y las técnicas; la utilidad de la evidencia y la información; y los pasos necesarios para que las evaluaciones incidan en políticas con mejores resultados.

Del primer punto, destaca que la evaluación es crucial y necesaria en una democracia, precisamente porque las políticas públicas surgen en un ambiente democrático. Hay que reconocer que en una democracia los gobernantes que elegimos son quienes toman las decisiones políticas. Las preguntas sobre cuál problema resolver, cuáles programas crear o cuál población atender, siempre serán una decisión política, porque los políticos son quienes tienen la legitimidad democrática.

La ciudadanía los eligió para ello. Pero, para que las decisiones políticas generen mejores resultados, deben estar informadas por las decisiones técnicas y, desde un punto de vista amplio, es un ganar-ganar para ambas partes ya que, si hay mejores políticas públicas, redituará en mayor beneficio político.

El trabajo realizado por Inevap fomenta un diálogo entre las decisiones técnicas y las políticas y así el Instituto contribuye a que las políticas públicas alcancen sus objetivos de mejor manera. La lógica técnica, la política no van en sentido contrario. Es necesario generar las condiciones para que ambas posturas se puedan entender.

De la segunda vertiente destaco que la evidencia es fundamental para definir los problemas públicos y las mejores alternativas de solución. En ese sentido, la evaluación no es una etapa aislada que ocurre al final de una política o un programa público, sino que debe incidir desde el diseño donde se plantean los problemas y se discuten las alternativas, incluso para tener buenos diagnósticos; en otras palabras, también a través de la evaluación se genera información útil para quienes toman decisiones dentro de los gobiernos.

Actualmente las políticas públicas generan información y están abiertas para los ciudadanos. Gracias a la normativa de transparencia se encuentra disponible información relevante como padrones de beneficiarios, indicadores, registros administrativos o datos abiertos. Este cúmulo de información es uno de los principales insumos para llevar a cabo evaluaciones con las cuales, la ciudadanía tendrá elementos para saber si se resuelven o no los problemas públicos y para conocer cómo funcionan los gobiernos.

Para cerrar su intervención, nuestro conferencista puntualizó que en el caso de la planeación del desarrollo es necesario se complemente con la lógica de la evaluación para conocer cómo se van alcanzando los objetivos planteados. Un buen plan no garantiza una buena implementación y debe ser lo suficientemente flexible para adecuarlo con la información que generan las evaluaciones.

Por último, es necesario reconocer que las políticas públicas siempre son perfectibles, es decir, siempre tienen un margen de mejora.