/ viernes 3 de julio de 2020

El colapso de los servicios de Salud

Durango está prácticamente rebasado en sus servicios de salud para atención de casos Covid-19. Las camas dispuestas para el efecto prácticamente están saturadas y, con los casos confirmados e informados entre el 21 de junio y el 1 de julio (614), además de los sospechosos (1062), el riesgo anunciado desde el inicio de la pandemia pudiera convertirse en un hecho en los próximos días.

Tuve acceso a un segmento de información interna en la que se actualiza diariamente la ocupación en cada uno de los hospitales del Estado. El colapso está muy cercano y, de confirmarse las proyecciones estadísticas epidemiológicas, no habrá ni camas, ventiladores o unidades de terapia intensiva respiratoria con la capacidad para responder al imparable contagio.

Tal información, a cargo de la Dirección de Servicios de Salud y la Subdirección de Epidemiología y Medicina Preventiva de la Secretaría de Salud en Durango (SSD), establece que entre el IMSS, SSD e ISSSTE, cuentan en el Estado con 212 camas Covid-19 repartidas entre siete hospitales (aunque no están contempladas en el reporte, la Sedena anunció 30 más, las cuales están en el Hospital General de Zona ubicado en el Cuartel 5 de Mayo).

La actualización hasta el 1 de julio a las 20:00 horas decía que el HG 450 estaba al 100% y el Hospital General de Gómez Palacio al 71%, ambos de la SSD; en tanto, los dos nosocomios del ISSSTE, presentaban una ocupación similar o peor: 100% en la capital y al 81% en la ciudad lagunera.

El Seguro Social, en sus tres hospitales presenta un panorama menos sombrío: En el HGZ No. 1 de la capital está al 27%, los HGZ 46 y 51 de Gómez Palacio se mantenían al 37 y 45%, respectivamente. Sin embargo, la curva de contagios no cede y, de acuerdo a especialistas consultados y con la regla epidemiológica 100-20-20 que aplica la Organización Mundial de la Salud (OMS) en casos de pandemias o epidemias, entre los nuevos casos confirmados en los 10 últimos días y los sospechosos acumulados, el colapso de los servicios hospitalarios es inminente.

Apegados estrictamente a los reportes de las autoridades sanitarias en la entidad, en el lapso del 21 de junio al 1 de julio, en Durango existen 614 casos activos, aunque la SSD informó que son 449. Si se aplica la regla mínima informada por Hugo López-Gatell, vocero de la pandemia a nivel nacional, que por cada caso activo hay 8 más contagiados, la cifra es alarmante: 4 mil 912 casos nuevos pudieran confirmarse en los 14 días, a partir del primero de los 10 revisados.

Sería la devastación de la capacidad física instalada para la atención del Covid-19 en Durango y la catástrofe que puede venir, será responsabilidad de todos.

Explican las fuentes consultadas que, de acuerdo a la regla 100-20-20 de la OMS para pandemias y epidemias, de esos 4 mil 912 nuevos positivos, 982 requerirían vigilancia por manifestaciones clínicas importantes y, de ellos, en los siguientes 14 días, el 20% (196) puede requerir hospitalización y el 20% restante (39) necesitará ser intubado.

De las 212 camas instaladas, 105 ya están ocupadas; de las 107 disponibles aún, la gran mayoría están en los hospitales del IMSS: 103 y, de estas, 64 en sus hospitales de Gómez Palacio. Entre el ISSSTE y la SSD, sólo cuentan con CUATRO camas libres en todo el estado.

Hay más datos que se desprenden del informe de la SSD. En conjunto, los hospitales del Sector Salud atienden a: Pacientes NO intubados, 65; pacientes intubados, 30; total de pacientes hospitalizados, 105; total de camas, 212; ocupación y disponibilidad de camas, el dato se especificó líneas anteriores.

Sin embargo, las cifras no concuerdan. El comunicado emitido el 1 de julio por la SSD, afirma que los pacientes hospitalizados son 138; es decir, 33 más de los que detalla el informe interno.

Aunque el documento multicitado no fue proporcionado de manera oficial, tiene similitudes con la información presentada por el doctor Sergio González Romero, secretario de Salud, en la conferencia de prensa del 1 de julio y que ya se difundió en prácticamente todos los medios de comunicación. La veracidad o existencia de éste, puede ser desmentido o confirmado; la realidad es que el destino los alcanzó… nos alcanzó.

A diferencia de otras entidades, Durango no cuenta con un Hospital de Referencia Covid-19; seguramente ello motiva la desesperación de las autoridades por la creciente curva de contagios. Los apoyos del gobierno central no llegaron y si lo hicieron, fueron reducidos. Hoy las consecuencias de la política federal –o ¿estrategia?- para la atención de la pandemia las sufrimos los duranguenses.

La entidad necesita del apoyo inmediato del gobierno federal, de un viraje en la política de atención y el presupuesto asignado; de la ampliación inmediata de la capacidad física instalada, de la asignación urgente de recursos humanos, pero también de mayor claridad y precisión en la estadística que se procesa y se difunde en su caso.

Para saber dónde estamos parados, es necesario tener las cuentas claras. El presente ejercicio, que no se realiza a fondo, pero sí asesorado por médicos capaces y preocupados por la realidad que viene, es un mínimo ejemplo de lo que puede resultar de un trabajo más minucioso y profundo.

Hay sub y hasta sobre registro y no se acepta. Un ejemplo simple lo otorga el IMSS con su plataforma de Permisos Laborales Covid-19, que los expide de manera electrónica a quienes completan un cuestionario en línea y dicen padecer síntomas; pero no hay certeza en el seguimiento clínico. Ese documento, les recomienda que se aíslen y sigan cada medida preventiva dictada; pero “en caso de presentar un dato de alarma” acudan a urgencias de la unidad médica más cercana.

El Permiso Laboral Covid-19 del IMSS protege al asegurado hasta 14 días de ausencia en su trabajo. Si no presentó “datos de alarma” pero fue portador asintomático, nadie se enteró. Si el asegurado mintió, tampoco nadie se dio cuenta; pero eso será tema de otra entrega.

Hasta hoy, el manejo de la pandemia en la entidad está bien calificado. Las autoridades no deben permitir que esa percepción se revierta, por credibilidad, por confianza y tranquilidad de la población.

Hemos escuchado y leído al Gobierno Estatal, apelar y hasta rogar por la cooperación de la ciudadanía para disminuir la movilidad social. Aún no la hemos advertido en un mensaje claro y contundente, pero es necesaria la exigencia de una mejor respuesta al dos añero gobierno.

(Nota: La estimación de la duración de los casos activos se toma del estudio: Enfermedad por coronavirus, Covid-19: 1.3.9. Periodo infectivo: Evolución de la carga viral en muestras clínicas, realizado por el Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad del gobierno de España).

Durango está prácticamente rebasado en sus servicios de salud para atención de casos Covid-19. Las camas dispuestas para el efecto prácticamente están saturadas y, con los casos confirmados e informados entre el 21 de junio y el 1 de julio (614), además de los sospechosos (1062), el riesgo anunciado desde el inicio de la pandemia pudiera convertirse en un hecho en los próximos días.

Tuve acceso a un segmento de información interna en la que se actualiza diariamente la ocupación en cada uno de los hospitales del Estado. El colapso está muy cercano y, de confirmarse las proyecciones estadísticas epidemiológicas, no habrá ni camas, ventiladores o unidades de terapia intensiva respiratoria con la capacidad para responder al imparable contagio.

Tal información, a cargo de la Dirección de Servicios de Salud y la Subdirección de Epidemiología y Medicina Preventiva de la Secretaría de Salud en Durango (SSD), establece que entre el IMSS, SSD e ISSSTE, cuentan en el Estado con 212 camas Covid-19 repartidas entre siete hospitales (aunque no están contempladas en el reporte, la Sedena anunció 30 más, las cuales están en el Hospital General de Zona ubicado en el Cuartel 5 de Mayo).

La actualización hasta el 1 de julio a las 20:00 horas decía que el HG 450 estaba al 100% y el Hospital General de Gómez Palacio al 71%, ambos de la SSD; en tanto, los dos nosocomios del ISSSTE, presentaban una ocupación similar o peor: 100% en la capital y al 81% en la ciudad lagunera.

El Seguro Social, en sus tres hospitales presenta un panorama menos sombrío: En el HGZ No. 1 de la capital está al 27%, los HGZ 46 y 51 de Gómez Palacio se mantenían al 37 y 45%, respectivamente. Sin embargo, la curva de contagios no cede y, de acuerdo a especialistas consultados y con la regla epidemiológica 100-20-20 que aplica la Organización Mundial de la Salud (OMS) en casos de pandemias o epidemias, entre los nuevos casos confirmados en los 10 últimos días y los sospechosos acumulados, el colapso de los servicios hospitalarios es inminente.

Apegados estrictamente a los reportes de las autoridades sanitarias en la entidad, en el lapso del 21 de junio al 1 de julio, en Durango existen 614 casos activos, aunque la SSD informó que son 449. Si se aplica la regla mínima informada por Hugo López-Gatell, vocero de la pandemia a nivel nacional, que por cada caso activo hay 8 más contagiados, la cifra es alarmante: 4 mil 912 casos nuevos pudieran confirmarse en los 14 días, a partir del primero de los 10 revisados.

Sería la devastación de la capacidad física instalada para la atención del Covid-19 en Durango y la catástrofe que puede venir, será responsabilidad de todos.

Explican las fuentes consultadas que, de acuerdo a la regla 100-20-20 de la OMS para pandemias y epidemias, de esos 4 mil 912 nuevos positivos, 982 requerirían vigilancia por manifestaciones clínicas importantes y, de ellos, en los siguientes 14 días, el 20% (196) puede requerir hospitalización y el 20% restante (39) necesitará ser intubado.

De las 212 camas instaladas, 105 ya están ocupadas; de las 107 disponibles aún, la gran mayoría están en los hospitales del IMSS: 103 y, de estas, 64 en sus hospitales de Gómez Palacio. Entre el ISSSTE y la SSD, sólo cuentan con CUATRO camas libres en todo el estado.

Hay más datos que se desprenden del informe de la SSD. En conjunto, los hospitales del Sector Salud atienden a: Pacientes NO intubados, 65; pacientes intubados, 30; total de pacientes hospitalizados, 105; total de camas, 212; ocupación y disponibilidad de camas, el dato se especificó líneas anteriores.

Sin embargo, las cifras no concuerdan. El comunicado emitido el 1 de julio por la SSD, afirma que los pacientes hospitalizados son 138; es decir, 33 más de los que detalla el informe interno.

Aunque el documento multicitado no fue proporcionado de manera oficial, tiene similitudes con la información presentada por el doctor Sergio González Romero, secretario de Salud, en la conferencia de prensa del 1 de julio y que ya se difundió en prácticamente todos los medios de comunicación. La veracidad o existencia de éste, puede ser desmentido o confirmado; la realidad es que el destino los alcanzó… nos alcanzó.

A diferencia de otras entidades, Durango no cuenta con un Hospital de Referencia Covid-19; seguramente ello motiva la desesperación de las autoridades por la creciente curva de contagios. Los apoyos del gobierno central no llegaron y si lo hicieron, fueron reducidos. Hoy las consecuencias de la política federal –o ¿estrategia?- para la atención de la pandemia las sufrimos los duranguenses.

La entidad necesita del apoyo inmediato del gobierno federal, de un viraje en la política de atención y el presupuesto asignado; de la ampliación inmediata de la capacidad física instalada, de la asignación urgente de recursos humanos, pero también de mayor claridad y precisión en la estadística que se procesa y se difunde en su caso.

Para saber dónde estamos parados, es necesario tener las cuentas claras. El presente ejercicio, que no se realiza a fondo, pero sí asesorado por médicos capaces y preocupados por la realidad que viene, es un mínimo ejemplo de lo que puede resultar de un trabajo más minucioso y profundo.

Hay sub y hasta sobre registro y no se acepta. Un ejemplo simple lo otorga el IMSS con su plataforma de Permisos Laborales Covid-19, que los expide de manera electrónica a quienes completan un cuestionario en línea y dicen padecer síntomas; pero no hay certeza en el seguimiento clínico. Ese documento, les recomienda que se aíslen y sigan cada medida preventiva dictada; pero “en caso de presentar un dato de alarma” acudan a urgencias de la unidad médica más cercana.

El Permiso Laboral Covid-19 del IMSS protege al asegurado hasta 14 días de ausencia en su trabajo. Si no presentó “datos de alarma” pero fue portador asintomático, nadie se enteró. Si el asegurado mintió, tampoco nadie se dio cuenta; pero eso será tema de otra entrega.

Hasta hoy, el manejo de la pandemia en la entidad está bien calificado. Las autoridades no deben permitir que esa percepción se revierta, por credibilidad, por confianza y tranquilidad de la población.

Hemos escuchado y leído al Gobierno Estatal, apelar y hasta rogar por la cooperación de la ciudadanía para disminuir la movilidad social. Aún no la hemos advertido en un mensaje claro y contundente, pero es necesaria la exigencia de una mejor respuesta al dos añero gobierno.

(Nota: La estimación de la duración de los casos activos se toma del estudio: Enfermedad por coronavirus, Covid-19: 1.3.9. Periodo infectivo: Evolución de la carga viral en muestras clínicas, realizado por el Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad del gobierno de España).

ÚLTIMASCOLUMNAS