/ martes 14 de enero de 2020

EN CARTERA

Rezagos históricos

México tiene una deuda histórica con la pobreza y la desigualdad.

Urge repensar la agenda nacional y romper la inercia, la dinámica de los constante incrementos de los índices de criminalidad y la disminución del crecimiento económico, y los lastres en impunidad, corrupción, rezago educativo, desforestación, desempleo, drogadicción, desnutrición, los antivalores, la desintegración familiar, los “ninis”…

Es aplaudible que en el 2019 se haya registrado una menor inflación, la estabilidad de la moneda, el incremento a los salarios mínimos, el incremento en las reservas internacionales, la disminución de la deuda externa, subsidios directos a los adultos mayores, a los incapacitados, incremento en becas en todos los niveles educativos, pero los rezagos son muchos, principalmente en el desarrollo económico y la seguridad, y muy importante consolidar los principales rubros de la llamada 4T como lo es el relativo a la salud ya que en nuestro país existen 30 millones de trabajadores que no cuentan con seguridad social, casi el doble de quienes están registrados en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), es señal de una inquietante deficiencia de la economía.

Las cifras nos invitan a la urgencia de políticas públicas innovadoras: 30 millones de trabajadores que no cuentan con seguridad social; 13 millones de empleados sin un contrato escrito que los vincule con sus patrones, cuestión que por ley debería otorgarse; 6.4 millones de personas que perciben un salario mínimo o menos, condenado el trabajador y su familia a la desnutrición, ignorancia y al sufrimiento colectivo; 4 millones de trabajadores sin remuneraciones y 14 millones más en la economía informal, cifras que nos indican que en México predomina un mercado laboral que no es factor de movilidad social, que genera precariedad y que no propicia el bienestar de la población.

Analistas afirman que los mexicanos seguimos en un pasado que no acaba de morir y un presente que no acaba de nacer, insisten los saqueadores en seguir desmontando al Estado como fiduciario de la riqueza nacional en beneficio de un grupo de interés privado, es decir actuar por encima del interés general de la nación, o de al menos la mayoría de la ciudadanía.

De ahí las constantes campañas en contra de las decisiones del actual gobierno. Los gobiernos neoliberales que dieron paso a un sistema económico y social en decadencia acelerada y a una democracia ilegítima e ingobernable.

Pero aterricemos la presente colaboración en nuestro Durango y sus rezagos. Observamos al actual gobernador José Rosas Aispuro, incansable en la gestión ante el gobierno federal, sensible ante la problemática social y con visión de estadista para encontrar soluciones en espacios nacionales e internacionales. Y tiene razón cuando señala que los presupuestos que anualmente recibe Durango del gobierno federal son a todas luces insuficientes ante los rezagos históricos en infraestructura que le impiden su desarrollo.

No es posible que sigamos entre las 10 entidades con los menores presupuestos federales y cada uno con rezagos diversos. Por ejemplo, nuestro estado tiene el gran problema que en su geografía se cuentan más de seis mil comunidades con menos de 100 habitantes, a las cuales por nuestra orografía y dispersión es muy difícil llevarles los servicios básicos de salud y educación. Requerimos del gobierno federal apoyos suficientes y sin regateos para la:

Solución de fondo al rezago de la infraestructura hidráulica, con la perforación de pozos donde socialmente se requieran y técnicamente sean factibles, con la implementación de sistemas de riego con tecnología de punta con el fin de garantizar al campesino sus cosechas, inclusive con el aprovechamiento de la tierra con la reconversión productiva con dos siembras anuales.

Construcción de las seis presas que requerimos para almacenar el agua de la sierra y que se escurre a los estados circunvecinos cuando en nuestro estado carecemos de ese elemental líquido para el desarrollo de nuestras actividades agropecuarias y agroindustriales.

Las presas con sus debidos canales de distribución a las tierras de los municipios que los requieran, también garantizará no solamente las cosechas, sino la producción de ganado y desarrollo de la industria. Actualmente sólo el 20 por ciento de la tierra cultivable es de riego y el 80 por ciento es de temporal. Es tiempo de volver la vista al campo que está totalmente abandonado.

El campo es de la mayor prioridad. De la mayor importancia es la construcción de la presa Tunal II y solucionar en definitiva las inundaciones que se registran en nuestra ciudad de Durango en las temporadas de lluvias.

También requerimos del aprovechamiento de nuestros recursos naturales con valor agregado, basta que los exploten otros estados y naciones y nos regresen nuestra materia prima como producto terminado.

Debemos instalar las industrias para darle el valor agregado a la explotación de nuestros recursos naturales, con los beneficios inmediatos en empleo y con la consecuente instalación de industrias secundarias, pero para ello requerimos de la infraestructura necesaria para que el inversionista pueda instalar la correspondiente fábrica.

Basta de la instalación de las cadenas comerciales que sólo se llevan nuestro dinero a las casas matrices nacionales o extranjeras, sin pagar los impuestos correspondientes aquí en Durango, lo que afecta en la integración del presupuesto federal para Durango. Que el compromiso claro y firme sea establecer en Durango el modelo industrializador, de desarrollo y progreso integral.

Ojalá que esa injusticia se termine generando industria y empleo con el aprovechamiento integral de esos recursos explotados. No cabe duda, la explotación de nuestros bosques y yacimientos minerales siguen siendo la burla de los empresarios nacionales y extranjeros y la vergüenza de los durangueños.

Ante la violencia, hay que señalar que los delincuentes son gente joven que el crimen organizado copta ante el problema social de falta de oportunidades para trabajar y estudiar.

Existe un gran déficit en el empleo y de espacios educativos en media superior y superior. Basta de los “ninis” (que ni estudian ni trabajan). Para qué queremos egresados universitarios si tenemos una iniciativa privada, privada de iniciativa que no genera los empleos que demanda la sociedad, y que el egresado sólo recurre a la frustración al auto emplearse como taxistas, hamburgueseros, o lo peor, como carne de cañón a las garras de la delincuencia y la drogadicción.

También es urgente la terminación de los ejes carreteros y del ferrocarril Durango-Mazatlán, ya que la comunicación representa las vías al desarrollo, comunicación es progreso. Caímos en el error de apostarle al modelo maquilador como modelo económico para el desarrollo, ya que es una economía de coyuntura, de capital volátil, con explotación de la mano de obra ofertando salarios paupérrimos y por lo tanto no puede ser la columna vertebral del desarrollo de un estado; caímos en el abuso del modelo comercial, cuando debemos optar por un modelo industrializador competitivo para atraer inversiones.

No aplicamos políticas públicas para impulsar y desarrollar las vocaciones económicas de cada región, de conformidad a sus recursos naturales, por ejemplo, en Simón Bolívar existen cerros de mármol y no hay una sola marmolería.

La exigencia social ante los rezagos históricos ya no cabe en la simulación y la promesa no cumplida. El pueblo aún confía en una nueva moralidad pública, en una eficaz y eficiente impartición de justicia, en un alto a la impunidad, en una verdadera justicia social y en una justa distribución de la riqueza. Y por supuesto, en un verdadero apoyo del gobierno federal para Durango.

Rezagos históricos

México tiene una deuda histórica con la pobreza y la desigualdad.

Urge repensar la agenda nacional y romper la inercia, la dinámica de los constante incrementos de los índices de criminalidad y la disminución del crecimiento económico, y los lastres en impunidad, corrupción, rezago educativo, desforestación, desempleo, drogadicción, desnutrición, los antivalores, la desintegración familiar, los “ninis”…

Es aplaudible que en el 2019 se haya registrado una menor inflación, la estabilidad de la moneda, el incremento a los salarios mínimos, el incremento en las reservas internacionales, la disminución de la deuda externa, subsidios directos a los adultos mayores, a los incapacitados, incremento en becas en todos los niveles educativos, pero los rezagos son muchos, principalmente en el desarrollo económico y la seguridad, y muy importante consolidar los principales rubros de la llamada 4T como lo es el relativo a la salud ya que en nuestro país existen 30 millones de trabajadores que no cuentan con seguridad social, casi el doble de quienes están registrados en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), es señal de una inquietante deficiencia de la economía.

Las cifras nos invitan a la urgencia de políticas públicas innovadoras: 30 millones de trabajadores que no cuentan con seguridad social; 13 millones de empleados sin un contrato escrito que los vincule con sus patrones, cuestión que por ley debería otorgarse; 6.4 millones de personas que perciben un salario mínimo o menos, condenado el trabajador y su familia a la desnutrición, ignorancia y al sufrimiento colectivo; 4 millones de trabajadores sin remuneraciones y 14 millones más en la economía informal, cifras que nos indican que en México predomina un mercado laboral que no es factor de movilidad social, que genera precariedad y que no propicia el bienestar de la población.

Analistas afirman que los mexicanos seguimos en un pasado que no acaba de morir y un presente que no acaba de nacer, insisten los saqueadores en seguir desmontando al Estado como fiduciario de la riqueza nacional en beneficio de un grupo de interés privado, es decir actuar por encima del interés general de la nación, o de al menos la mayoría de la ciudadanía.

De ahí las constantes campañas en contra de las decisiones del actual gobierno. Los gobiernos neoliberales que dieron paso a un sistema económico y social en decadencia acelerada y a una democracia ilegítima e ingobernable.

Pero aterricemos la presente colaboración en nuestro Durango y sus rezagos. Observamos al actual gobernador José Rosas Aispuro, incansable en la gestión ante el gobierno federal, sensible ante la problemática social y con visión de estadista para encontrar soluciones en espacios nacionales e internacionales. Y tiene razón cuando señala que los presupuestos que anualmente recibe Durango del gobierno federal son a todas luces insuficientes ante los rezagos históricos en infraestructura que le impiden su desarrollo.

No es posible que sigamos entre las 10 entidades con los menores presupuestos federales y cada uno con rezagos diversos. Por ejemplo, nuestro estado tiene el gran problema que en su geografía se cuentan más de seis mil comunidades con menos de 100 habitantes, a las cuales por nuestra orografía y dispersión es muy difícil llevarles los servicios básicos de salud y educación. Requerimos del gobierno federal apoyos suficientes y sin regateos para la:

Solución de fondo al rezago de la infraestructura hidráulica, con la perforación de pozos donde socialmente se requieran y técnicamente sean factibles, con la implementación de sistemas de riego con tecnología de punta con el fin de garantizar al campesino sus cosechas, inclusive con el aprovechamiento de la tierra con la reconversión productiva con dos siembras anuales.

Construcción de las seis presas que requerimos para almacenar el agua de la sierra y que se escurre a los estados circunvecinos cuando en nuestro estado carecemos de ese elemental líquido para el desarrollo de nuestras actividades agropecuarias y agroindustriales.

Las presas con sus debidos canales de distribución a las tierras de los municipios que los requieran, también garantizará no solamente las cosechas, sino la producción de ganado y desarrollo de la industria. Actualmente sólo el 20 por ciento de la tierra cultivable es de riego y el 80 por ciento es de temporal. Es tiempo de volver la vista al campo que está totalmente abandonado.

El campo es de la mayor prioridad. De la mayor importancia es la construcción de la presa Tunal II y solucionar en definitiva las inundaciones que se registran en nuestra ciudad de Durango en las temporadas de lluvias.

También requerimos del aprovechamiento de nuestros recursos naturales con valor agregado, basta que los exploten otros estados y naciones y nos regresen nuestra materia prima como producto terminado.

Debemos instalar las industrias para darle el valor agregado a la explotación de nuestros recursos naturales, con los beneficios inmediatos en empleo y con la consecuente instalación de industrias secundarias, pero para ello requerimos de la infraestructura necesaria para que el inversionista pueda instalar la correspondiente fábrica.

Basta de la instalación de las cadenas comerciales que sólo se llevan nuestro dinero a las casas matrices nacionales o extranjeras, sin pagar los impuestos correspondientes aquí en Durango, lo que afecta en la integración del presupuesto federal para Durango. Que el compromiso claro y firme sea establecer en Durango el modelo industrializador, de desarrollo y progreso integral.

Ojalá que esa injusticia se termine generando industria y empleo con el aprovechamiento integral de esos recursos explotados. No cabe duda, la explotación de nuestros bosques y yacimientos minerales siguen siendo la burla de los empresarios nacionales y extranjeros y la vergüenza de los durangueños.

Ante la violencia, hay que señalar que los delincuentes son gente joven que el crimen organizado copta ante el problema social de falta de oportunidades para trabajar y estudiar.

Existe un gran déficit en el empleo y de espacios educativos en media superior y superior. Basta de los “ninis” (que ni estudian ni trabajan). Para qué queremos egresados universitarios si tenemos una iniciativa privada, privada de iniciativa que no genera los empleos que demanda la sociedad, y que el egresado sólo recurre a la frustración al auto emplearse como taxistas, hamburgueseros, o lo peor, como carne de cañón a las garras de la delincuencia y la drogadicción.

También es urgente la terminación de los ejes carreteros y del ferrocarril Durango-Mazatlán, ya que la comunicación representa las vías al desarrollo, comunicación es progreso. Caímos en el error de apostarle al modelo maquilador como modelo económico para el desarrollo, ya que es una economía de coyuntura, de capital volátil, con explotación de la mano de obra ofertando salarios paupérrimos y por lo tanto no puede ser la columna vertebral del desarrollo de un estado; caímos en el abuso del modelo comercial, cuando debemos optar por un modelo industrializador competitivo para atraer inversiones.

No aplicamos políticas públicas para impulsar y desarrollar las vocaciones económicas de cada región, de conformidad a sus recursos naturales, por ejemplo, en Simón Bolívar existen cerros de mármol y no hay una sola marmolería.

La exigencia social ante los rezagos históricos ya no cabe en la simulación y la promesa no cumplida. El pueblo aún confía en una nueva moralidad pública, en una eficaz y eficiente impartición de justicia, en un alto a la impunidad, en una verdadera justicia social y en una justa distribución de la riqueza. Y por supuesto, en un verdadero apoyo del gobierno federal para Durango.

ÚLTIMASCOLUMNAS
viernes 22 de marzo de 2024

En Cartera

154 Aniversario de la Fundación de la ByCENED

Víctor Samuel Palencia Alonso

viernes 15 de marzo de 2024

En Cartera

CCXVIII (218) Aniversario del natalicio de Benito Pablo Juárez García (1/2)

Víctor Samuel Palencia Alonso

viernes 01 de marzo de 2024

En cartera

A las urnas… a votar libremente por su candidato y partido(s)

Víctor Samuel Palencia Alonso

viernes 16 de febrero de 2024

En cartera

13 de Febrero: Día Mundial de la Radio

Víctor Samuel Palencia Alonso

viernes 09 de febrero de 2024

En cartera

14 de Febrero: Día del Amor y la Amistad

Víctor Samuel Palencia Alonso

viernes 02 de febrero de 2024

En cartera

A 58 Años en las Páginas de El Sol de Durango y 54 en la Literatura (2/2)

Víctor Samuel Palencia Alonso

sábado 27 de enero de 2024

En cartera

58 Años en las Páginas de El Sol de Durango y 54 en la Literatura (1/2)

Víctor Samuel Palencia Alonso

sábado 20 de enero de 2024

En Cartera

15 de enero: “Día del Compositor” en México

Víctor Samuel Palencia Alonso

viernes 12 de enero de 2024

En Cartera

Antecedentes Educativos en Durango

Víctor Samuel Palencia Alonso

Cargar Más