/ lunes 18 de marzo de 2019

Enríquez haría campaña sin retirarse de la Alcaldía

Enríquez está inmerso en el proceso electoral interno de Morena para definir al candidato a Presidente municipal por Durango, luego que según dicen, por instrucciones “de arriba”, se repone el proceso y serán resultados de las encuestas, las que definan la candidatura.

Ave de las tempestades, el doctor José Ramón Enríquez está dentro del escenario electoral con posibilidades incluso, de encabezar el proyecto de la Cuarta Transformación en Durango, pero a la vez está inmerso en el ojo del huracán político por una supuesta obsesión de poder, que lo hace el blanco de señalamientos de todo tipo.

Y, sin embargo, el actual presidente municipal, ni suda ni se acongoja, y continúa al frente del Ayuntamiento de Durango, con acciones estridentes, pero que no dejan de ser contundentes, para responder a los duranguenses, en un carril que a todas luces es meramente electoral.

Detractores al galeno pueden esgrimir una y mil razones de su proyecto en pos del máximo poder en Durango, con señalamientos de autoritarismo y soberbia, contra quienes creen (se dice que por miles), en un profesionista que ha demostrado humanismo en su trayectoria de ayudar a los más vulnerables, y para lo cual afirman, hay familias enteras que lo atestiguan de haber recibido los beneficios médicos.

Lo cierto es que el anuncio de otorgar la base laboral a tres mil empleados municipales, e incorporar al Infonavit a los cinco mil 750 trabajadores, tanto de confianza como sindicalizados, es sin lugar a dudas, un acierto que le redituará capital político-electoral.

Enríquez está inmerso en el proceso electoral interno de Morena para definir al candidato a presidente municipal por Durango, luego que según dicen, por instrucciones “de arriba”, se repone el proceso y serán resultados de las encuestas, las que definan la candidatura.

Y aunque Enríquez se deslindó de las objeciones que se presentaron a los órganos competentes de Morena por los resultados iniciales de las resoluciones presentadas por la Comisión Nacional de Elecciones, lo cierto es que sigue en la contienda además con la candidatura en la bolsa de Movimiento Ciudadano para buscar la reelección.

Una vez que el PAN le cerró la puerta para ser su candidato, Enríquez reorientó su pretensión hacia el Partido de López Obrador, con quien siempre mantuvo relaciones personales y políticas

No obstante, enfrentó, como siempre sucede en la lucha por el poder, a fuerzas amigas y enemigas que ahora lo enfrentan con un escenario incierto en Morena, pero que aún sigue vigente la posibilidad de ser el candidato morenista a oresidente municipal, según aseguran sus afines.

Pero antes tendrá que salvar varias aduanas “amigas y enemigas”:

Alejandro González propietario del PT en Durango, pero con indudable poder en el escenario nacional, es el virtual candidato a Presidente municipal del PT, partido con el que a nivel nacional Morena negocia ir en alianza.

Según declaraciones a la prensa, “El Tirantes” no quiere a Enríquez en la candidatura común y empuja por ser él, de lograr su objetivo, dejaría en el camino a personajes como Otniel, Vela, Silvestre, Sandra, entre otros. Sin embargo, hay entre los morenistas “internos”, un acuerdo para que tal escenario no suceda.

Gonzalo tiene instrumentos de negociación nacional para exigir que la asociación con Morena en Durango, él vaya como candidato, y ceder espacios, por ejemplo, en Puebla, donde Yeidckol Polevnsky empuja fuerte por el morenista Barbosa.

López Obrador se ha mantenido hasta ahora, al menos en las formas, ajeno a las decisiones de Morena en Durango, lo cual ha dejado desencantados a varios de los personajes locales que han tratado de entrevistar al tabasqueño, y fortalecido a quienes tienen la esperanza de que esto se resuelva por las encuestas.

Un factor que la gente cercana a Enríquez a tratado de capitalizar a su favor, fue la opinión favorable que emitió Rodolfo Elizondo por la basificación e incorporación al Infonavit, de los trabajadores municipales. Quién conoce al panista, y además con el factor de que su hermana sigue como colaboradora de Enríquez, lo ha descalificado.

“A río revuelto, ganancia de pescadores”, dice el conocido refrán popular que en esta ocasión aprovecha Enríquez para capitalizar su intención en busca de la reelección en la alcaldía duranguense, dado el reborujo que persiste y que ha inconformado, por ahora, al menos a los simpatizantes de los 18 aspirantes que se registraron en la contienda morenista.

Son decenas de impugnaciones las que se presentaron en el proceso interno de selección de candidatos de Morena, y que obligaron a reponer las etapas estatutarias, de tal manera que al final los 18 aspirantes a la candidatura de la Presidencia Municipal de Durango, están considerados en las encuestas que definirán al abanderado del partido hegemónico nacional. “¿Saldrán a relucir las sabandijas que quieren medrar a Morena?, según Yeidckol”.

Desde ahora el Presidente municipal en funciones es criticado por su pretensión de hacer campaña en busca del voto ciudadano que lo reelija, sin solicitar licencia al cargo: por las mañanas ejercería como funcionario público, y en las tardes la dedicaría a solicitar el sufragio.

Algo así como lo que hace Trump en su proyecto por reelegirse al frente de la Presidencia de los Estados Unidos, pero que allá es visto como algo normal, y en México y Durango, aún no se ha dado. Se cuestiona la ética política.

Es innegable que para bien o para mal, el doctor José Ramón Enríquez, despierta pasiones encontradas, querencias y odios al calor de la política, y que precisamente lo han caracterizado como “ave de tempestades”.

De participar en la contienda por la reelección, los duranguenses tendrán la oportunidad de evaluar la gestión de Enríquez, a través del voto el dos de junio próximo.

Enríquez está inmerso en el proceso electoral interno de Morena para definir al candidato a Presidente municipal por Durango, luego que según dicen, por instrucciones “de arriba”, se repone el proceso y serán resultados de las encuestas, las que definan la candidatura.

Ave de las tempestades, el doctor José Ramón Enríquez está dentro del escenario electoral con posibilidades incluso, de encabezar el proyecto de la Cuarta Transformación en Durango, pero a la vez está inmerso en el ojo del huracán político por una supuesta obsesión de poder, que lo hace el blanco de señalamientos de todo tipo.

Y, sin embargo, el actual presidente municipal, ni suda ni se acongoja, y continúa al frente del Ayuntamiento de Durango, con acciones estridentes, pero que no dejan de ser contundentes, para responder a los duranguenses, en un carril que a todas luces es meramente electoral.

Detractores al galeno pueden esgrimir una y mil razones de su proyecto en pos del máximo poder en Durango, con señalamientos de autoritarismo y soberbia, contra quienes creen (se dice que por miles), en un profesionista que ha demostrado humanismo en su trayectoria de ayudar a los más vulnerables, y para lo cual afirman, hay familias enteras que lo atestiguan de haber recibido los beneficios médicos.

Lo cierto es que el anuncio de otorgar la base laboral a tres mil empleados municipales, e incorporar al Infonavit a los cinco mil 750 trabajadores, tanto de confianza como sindicalizados, es sin lugar a dudas, un acierto que le redituará capital político-electoral.

Enríquez está inmerso en el proceso electoral interno de Morena para definir al candidato a presidente municipal por Durango, luego que según dicen, por instrucciones “de arriba”, se repone el proceso y serán resultados de las encuestas, las que definan la candidatura.

Y aunque Enríquez se deslindó de las objeciones que se presentaron a los órganos competentes de Morena por los resultados iniciales de las resoluciones presentadas por la Comisión Nacional de Elecciones, lo cierto es que sigue en la contienda además con la candidatura en la bolsa de Movimiento Ciudadano para buscar la reelección.

Una vez que el PAN le cerró la puerta para ser su candidato, Enríquez reorientó su pretensión hacia el Partido de López Obrador, con quien siempre mantuvo relaciones personales y políticas

No obstante, enfrentó, como siempre sucede en la lucha por el poder, a fuerzas amigas y enemigas que ahora lo enfrentan con un escenario incierto en Morena, pero que aún sigue vigente la posibilidad de ser el candidato morenista a oresidente municipal, según aseguran sus afines.

Pero antes tendrá que salvar varias aduanas “amigas y enemigas”:

Alejandro González propietario del PT en Durango, pero con indudable poder en el escenario nacional, es el virtual candidato a Presidente municipal del PT, partido con el que a nivel nacional Morena negocia ir en alianza.

Según declaraciones a la prensa, “El Tirantes” no quiere a Enríquez en la candidatura común y empuja por ser él, de lograr su objetivo, dejaría en el camino a personajes como Otniel, Vela, Silvestre, Sandra, entre otros. Sin embargo, hay entre los morenistas “internos”, un acuerdo para que tal escenario no suceda.

Gonzalo tiene instrumentos de negociación nacional para exigir que la asociación con Morena en Durango, él vaya como candidato, y ceder espacios, por ejemplo, en Puebla, donde Yeidckol Polevnsky empuja fuerte por el morenista Barbosa.

López Obrador se ha mantenido hasta ahora, al menos en las formas, ajeno a las decisiones de Morena en Durango, lo cual ha dejado desencantados a varios de los personajes locales que han tratado de entrevistar al tabasqueño, y fortalecido a quienes tienen la esperanza de que esto se resuelva por las encuestas.

Un factor que la gente cercana a Enríquez a tratado de capitalizar a su favor, fue la opinión favorable que emitió Rodolfo Elizondo por la basificación e incorporación al Infonavit, de los trabajadores municipales. Quién conoce al panista, y además con el factor de que su hermana sigue como colaboradora de Enríquez, lo ha descalificado.

“A río revuelto, ganancia de pescadores”, dice el conocido refrán popular que en esta ocasión aprovecha Enríquez para capitalizar su intención en busca de la reelección en la alcaldía duranguense, dado el reborujo que persiste y que ha inconformado, por ahora, al menos a los simpatizantes de los 18 aspirantes que se registraron en la contienda morenista.

Son decenas de impugnaciones las que se presentaron en el proceso interno de selección de candidatos de Morena, y que obligaron a reponer las etapas estatutarias, de tal manera que al final los 18 aspirantes a la candidatura de la Presidencia Municipal de Durango, están considerados en las encuestas que definirán al abanderado del partido hegemónico nacional. “¿Saldrán a relucir las sabandijas que quieren medrar a Morena?, según Yeidckol”.

Desde ahora el Presidente municipal en funciones es criticado por su pretensión de hacer campaña en busca del voto ciudadano que lo reelija, sin solicitar licencia al cargo: por las mañanas ejercería como funcionario público, y en las tardes la dedicaría a solicitar el sufragio.

Algo así como lo que hace Trump en su proyecto por reelegirse al frente de la Presidencia de los Estados Unidos, pero que allá es visto como algo normal, y en México y Durango, aún no se ha dado. Se cuestiona la ética política.

Es innegable que para bien o para mal, el doctor José Ramón Enríquez, despierta pasiones encontradas, querencias y odios al calor de la política, y que precisamente lo han caracterizado como “ave de tempestades”.

De participar en la contienda por la reelección, los duranguenses tendrán la oportunidad de evaluar la gestión de Enríquez, a través del voto el dos de junio próximo.