/ lunes 18 de julio de 2022

Esteban en Sedena

La estrategia implementada por el gobernador electo, Esteban Villegas Villarreal, de adelantar acercamiento con el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, es consecuencia del complejo escenario que presentan las finanzas públicas, y los problemas que significarán al inicio de la administración 2022-2028.

El próximo inquilino del Bicentenario, no es un improvisado ni menos un bisoño en el servicio público, de ahí que a poco menos de dos meses de asumir el cargo, con habilidad se ha dado a la tarea de tocar las puertas de los integrantes del gabinete federal, sabedor que de los acuerdos que logre, dependerá que fluyan los recursos y haya una coordinación de esfuerzos y acciones para que Durango no quede inmóvil.

Gobernar un estado, como es el caso de Durango, debe ser al margen de ideologías políticas, y eso lo sabe Esteban, según lo ha evidenciado en sus declaraciones, con respecto a la relación que pretende llevar con los otros órdenes de gobierno que son encabezados por representantes de partidos diferentes a los que abanderó, en el triunfo electoral que obtuvo el pasado primero de junio.

En ese tenor, promoverá una conexión de colaboración con la federación y los municipios, con la expectativa de que ello redunde en obras que le solicitaron en campaña los electores.

Esteban sabe la importancia de establecer un vínculo institucional de armonía, de proximidad y entendimiento con Palacio Nacional, con el objetivo de que se incluyan recursos presupuestados para la ejecución de añejas demandas, truncadas por desavenencias políticas, y no por cuestiones técnico financieras.

No fue fortuita la reunión que recientemente sostuvo con el secretario de la Defensa Nacional, general Luis Crescencio Sandoval, que de inmediato rindió frutos con acuerdos específicos para que Durango se convierta en un estado seguro, con especial énfasis en la Comarca Lagunera.

En la agenda de trabajo con funcionarios federales, el sucesor de Aispuro se reunió con César Yáñez, subsecretario de gobierno de Gobernación, uno de los políticos más cercano a López Obrador durante los últimos 20 años.

Y es que el tema de gobernabilidad será importante durante los primeros 100 días del gobierno que comienza el 15 de septiembre, en que Esteban demostrará de qué está hecho para llevar a Durango al desarrollo industrial.

En el plan de trabajo diseñado por el sanjuanero en la capital del país, se contempla insistir que la federación se responsabilice del gasto educativo, y ello posibilite que mayor cantidad de recursos se canalicen a obras.

La estrategia implementada por el gobernador electo, Esteban Villegas Villarreal, de adelantar acercamiento con el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, es consecuencia del complejo escenario que presentan las finanzas públicas, y los problemas que significarán al inicio de la administración 2022-2028.

El próximo inquilino del Bicentenario, no es un improvisado ni menos un bisoño en el servicio público, de ahí que a poco menos de dos meses de asumir el cargo, con habilidad se ha dado a la tarea de tocar las puertas de los integrantes del gabinete federal, sabedor que de los acuerdos que logre, dependerá que fluyan los recursos y haya una coordinación de esfuerzos y acciones para que Durango no quede inmóvil.

Gobernar un estado, como es el caso de Durango, debe ser al margen de ideologías políticas, y eso lo sabe Esteban, según lo ha evidenciado en sus declaraciones, con respecto a la relación que pretende llevar con los otros órdenes de gobierno que son encabezados por representantes de partidos diferentes a los que abanderó, en el triunfo electoral que obtuvo el pasado primero de junio.

En ese tenor, promoverá una conexión de colaboración con la federación y los municipios, con la expectativa de que ello redunde en obras que le solicitaron en campaña los electores.

Esteban sabe la importancia de establecer un vínculo institucional de armonía, de proximidad y entendimiento con Palacio Nacional, con el objetivo de que se incluyan recursos presupuestados para la ejecución de añejas demandas, truncadas por desavenencias políticas, y no por cuestiones técnico financieras.

No fue fortuita la reunión que recientemente sostuvo con el secretario de la Defensa Nacional, general Luis Crescencio Sandoval, que de inmediato rindió frutos con acuerdos específicos para que Durango se convierta en un estado seguro, con especial énfasis en la Comarca Lagunera.

En la agenda de trabajo con funcionarios federales, el sucesor de Aispuro se reunió con César Yáñez, subsecretario de gobierno de Gobernación, uno de los políticos más cercano a López Obrador durante los últimos 20 años.

Y es que el tema de gobernabilidad será importante durante los primeros 100 días del gobierno que comienza el 15 de septiembre, en que Esteban demostrará de qué está hecho para llevar a Durango al desarrollo industrial.

En el plan de trabajo diseñado por el sanjuanero en la capital del país, se contempla insistir que la federación se responsabilice del gasto educativo, y ello posibilite que mayor cantidad de recursos se canalicen a obras.