/ miércoles 1 de julio de 2020

Indicador mediático

La falta de sensibilidad a los abogados

Ayer martes explotó otra bomba política más en Durango. Desde que inició la cuarentena, abogados locales han presionado al Poder Judicial para que reabra sus puertas al gremio porque necesitan laborar.

El Tribunal informó que procederían a la reapertura debido a la presión, pero este lunes se conoció un escrito del secretario de Salud, Sergio González Romero, donde le recomienda a Esteban Calderón Rosas, presidente del TSJ, que la reapertura sea en 15 días más debido el incremento de casos Covid-19, hospitalización y fallecimientos en el Estado.

Gustavo Gamero, presidente de la Barra de Abogados había aplaudido el anuncio de reapertura del Poder Judicial, pero ante este oficio del secretario de Salud, la noticia les cayó como balde de agua fría. De inmediato convocaron a medios de comunicación para emitir su inconformidad.

Señalaron que hay un contubernio entre el secretario de Salud y el presidente del Poder Judicial, pero no sería tanto un contubernio, sino simplemente las medidas sanitarias que debe implementar cada oficina de gobierno ante los contagios que ya se están registrando en oficinas locales.

Precisamente este fin de semana se supo del contagio de trabajadores de la Secretaría General de Gobierno, la puesta en cuarentena de personal del ISSSTE de Durango, la confirmación de Jorge Pérez, director de Servicios Públicos y el riesgo que corren todos los funcionarios ante el Covid-19, eso sin mencionar el caso de un interno fallecido por esta enfermedad en el Cereso 1.

El documento que circuló en redes sociales, emitido desde la Secretaría de Salud, está fechado con el 28 de junio del 2020 y, como ya comprobamos, nadie ha desmentido ese documento. Por ello, todo indicaría que el Poder Judicial acatará la recomendación sanitaria de Sergio González Romero, de considerar la reapertura este primero de julio y aplazarla hasta dos semanas más.

El sector de abogados, sumamente molesto y con justa razón, se manifestó en su sede, pues tienen más de 100 días sin adelantarle a sus procesos legales, ello se traduce en desempleo.

Sin embargo, algo ha faltado: mayor empatía en el Poder Judicial. El presidente del Tribunal Superior de Justicia, Esteban Calderón Rosas no ha tenido el tacto suficiente para atender la necesidad de los abogados. No ha puesto medidas para que vayan sacando sus pendientes poco a poco siendo el Poder Judicial una estructura laboral sumamente grande, las normas de trabajo no han permitido adelantar diversos procesos que los abogados tienen en sus escritorios empolvados en sus cajones simplemente porque las puertas del Tribunal están cerradas.

El presidente del Tribunal deberá implementar medidas accesibles para agilizar las labores jurídicas pero supervisadas con estrictos protocolos de salud y no confrontando al sector de los abogados, quienes simplemente quieren trabajar.

Estos tiempos, de hecho, son para olvidar ciertas rencillas políticas con el gremio leguleyo y escuchar sus necesidades, proponer soluciones y no cerrar las puertas totalmente del Poder Judicial o menospreciar sus peticiones.

Conducir un Poder Judicial no es cosa menor, hay que tener tacto social, de justicia y un sentido político. Pero además, tener sensibilidad y creatividad para que los procesos jurídicos no queden rezagados, darle cabida a los licenciados que necesitan agilizar sus procedimientos porque de su trabajo depende el sustento de familias.

Todo ello se puede hacer aplicando las medidas sanitarias necesarias y logrando consensos, no permaneciendo cerrado a las necesidades e incluso oportunidades de trabajo.

@CEOMarcosOrtiz

La falta de sensibilidad a los abogados

Ayer martes explotó otra bomba política más en Durango. Desde que inició la cuarentena, abogados locales han presionado al Poder Judicial para que reabra sus puertas al gremio porque necesitan laborar.

El Tribunal informó que procederían a la reapertura debido a la presión, pero este lunes se conoció un escrito del secretario de Salud, Sergio González Romero, donde le recomienda a Esteban Calderón Rosas, presidente del TSJ, que la reapertura sea en 15 días más debido el incremento de casos Covid-19, hospitalización y fallecimientos en el Estado.

Gustavo Gamero, presidente de la Barra de Abogados había aplaudido el anuncio de reapertura del Poder Judicial, pero ante este oficio del secretario de Salud, la noticia les cayó como balde de agua fría. De inmediato convocaron a medios de comunicación para emitir su inconformidad.

Señalaron que hay un contubernio entre el secretario de Salud y el presidente del Poder Judicial, pero no sería tanto un contubernio, sino simplemente las medidas sanitarias que debe implementar cada oficina de gobierno ante los contagios que ya se están registrando en oficinas locales.

Precisamente este fin de semana se supo del contagio de trabajadores de la Secretaría General de Gobierno, la puesta en cuarentena de personal del ISSSTE de Durango, la confirmación de Jorge Pérez, director de Servicios Públicos y el riesgo que corren todos los funcionarios ante el Covid-19, eso sin mencionar el caso de un interno fallecido por esta enfermedad en el Cereso 1.

El documento que circuló en redes sociales, emitido desde la Secretaría de Salud, está fechado con el 28 de junio del 2020 y, como ya comprobamos, nadie ha desmentido ese documento. Por ello, todo indicaría que el Poder Judicial acatará la recomendación sanitaria de Sergio González Romero, de considerar la reapertura este primero de julio y aplazarla hasta dos semanas más.

El sector de abogados, sumamente molesto y con justa razón, se manifestó en su sede, pues tienen más de 100 días sin adelantarle a sus procesos legales, ello se traduce en desempleo.

Sin embargo, algo ha faltado: mayor empatía en el Poder Judicial. El presidente del Tribunal Superior de Justicia, Esteban Calderón Rosas no ha tenido el tacto suficiente para atender la necesidad de los abogados. No ha puesto medidas para que vayan sacando sus pendientes poco a poco siendo el Poder Judicial una estructura laboral sumamente grande, las normas de trabajo no han permitido adelantar diversos procesos que los abogados tienen en sus escritorios empolvados en sus cajones simplemente porque las puertas del Tribunal están cerradas.

El presidente del Tribunal deberá implementar medidas accesibles para agilizar las labores jurídicas pero supervisadas con estrictos protocolos de salud y no confrontando al sector de los abogados, quienes simplemente quieren trabajar.

Estos tiempos, de hecho, son para olvidar ciertas rencillas políticas con el gremio leguleyo y escuchar sus necesidades, proponer soluciones y no cerrar las puertas totalmente del Poder Judicial o menospreciar sus peticiones.

Conducir un Poder Judicial no es cosa menor, hay que tener tacto social, de justicia y un sentido político. Pero además, tener sensibilidad y creatividad para que los procesos jurídicos no queden rezagados, darle cabida a los licenciados que necesitan agilizar sus procedimientos porque de su trabajo depende el sustento de familias.

Todo ello se puede hacer aplicando las medidas sanitarias necesarias y logrando consensos, no permaneciendo cerrado a las necesidades e incluso oportunidades de trabajo.

@CEOMarcosOrtiz