/ viernes 26 de octubre de 2018

Jóvenes volver a pensar

De consulta a consulta…

Ahora que el gabinete del presidente electo, mencionan: “Quienes no quieren la consulta ciudadana del Nuevo Aeropuerto Internacional de México están acostumbrados al autoritarismo”. Según ellos. Y conociendo que las consultas populares, o sufragios populares, en derecho constitucional y en la historia constitucional, son deliberaciones públicas tomadas por el mundo como cuerpo electoral y cuerpo de legislación.

Existen distintos tipos de consultas que se realizan en forma de participación política, y cada vez el pueblo llega a la decisión de forma directa sobre algo sometido a su voluntad, tanto los órganos del Estado como los ciudadanos ejercen una forma de democracia directa.

Además este sistema de consulta está plenamente legislada en modo y forma por las leyes, de una política seria y congruente no de ocurrencias ni retóricas que “el pueblo no se equivoca” frase de Jean-Jacques Rousseau consideraba que el soberano, una vez constituido por la voluntad general, era infalible y no tenía porqué proporcionarle garantías a sus súbditos, pues era improbable que “el cuerpo quiera perjudicar a sus miembros”.

Aunque, como dice Bobbio, Rousseau no ideó un Estado sin límites al poder. No olvidar que el engaño populista, identifican la concepción de la democracia de los socialistas del siglo XXI con esta idea roussoniana. Que claramente la quieren implantar en nuestro país, desde el punto de vista ciencia política, la consulta popular equivale a un sufragio popular, siendo este: el derecho político y constitucional a votar a los cargos públicos electos.

En un sentido amplio, el sufragio abarca el activo, donde se determina quiénes tienen derecho al voto; y el pasivo, que se refiere a quiénes y en qué condiciones tienen derecho a ser elegidos. Y hacer una consulta consiste en el proceso mental de juzgar los méritos de múltiples opciones y seleccionar una o más de entre ellas. Además es imprescindible la participación política, que es el conjunto de acciones llevadas a cabo por los ciudadanos que no están necesariamente involucrados en la política de forma directa, y cuya acción pretende influir en el proceso político en el resultado del mismo.

En otras palabras, la participación política describe actividades directas o indirectas que realizan los ciudadanos para influir en las decisiones o en la elección de los gobernantes y se puede llevar a cabo de forma convencional por ejemplo la participación electoral y el activismo partidario o de forma no convencional como las actividades de protesta y el contacto con las autoridades. Y como son los participantes Inactivos: tratándose de individuos que no ejercen ningún tipo de participación.

Conformistas: siendo éstos aquellos que solo participan de vez en cuando. Contestatarios: refiriéndose a los grupos de personas que se movilizan de forma directa. Reformistas: los grupos de personas que se movilizan de forma institucional. Activistas: Que se movilizan tanto de forma directa como institucional. Y además para su validez aquí en México hay una metodología, de acuerdo con la ley de consulta popular la debe solicitar, el presidente de la República, el equivalente al 33% de los integrantes de cualquiera de las cámaras del Congreso, o los ciudadanos en un número equivalente, al menos, al 2% de los inscritos en la lista nominal de electores, mínimo se requiere para su validez conocer los siguientes puntos:

Objetivo de la consulta (bien claro), su marco muestral, su diseño muestral, su tamaño de muestra, la población sujeta a estudio, procedimiento de estimación de resultados y hasta su software utilizado, y ¿dónde está? Y caemos en el populismo de afirmar: “Es la voluntad del pueblo construir otra pista al aeropuerto militar de Santa Lucía, aunque el Fondo de Investigación del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MITRE) haya determinado la interferencia del espacio aéreo que sólo provocaría accidentes.

Es la voluntad del pueblo otorgarle la amnistía a los malandros aunque hayan masacrado a cientos de miles de conciudadanos. El pueblo no se equivoca. Ab Absurdo: “Por el absurdo”.

tomymx@me.com

De consulta a consulta…

Ahora que el gabinete del presidente electo, mencionan: “Quienes no quieren la consulta ciudadana del Nuevo Aeropuerto Internacional de México están acostumbrados al autoritarismo”. Según ellos. Y conociendo que las consultas populares, o sufragios populares, en derecho constitucional y en la historia constitucional, son deliberaciones públicas tomadas por el mundo como cuerpo electoral y cuerpo de legislación.

Existen distintos tipos de consultas que se realizan en forma de participación política, y cada vez el pueblo llega a la decisión de forma directa sobre algo sometido a su voluntad, tanto los órganos del Estado como los ciudadanos ejercen una forma de democracia directa.

Además este sistema de consulta está plenamente legislada en modo y forma por las leyes, de una política seria y congruente no de ocurrencias ni retóricas que “el pueblo no se equivoca” frase de Jean-Jacques Rousseau consideraba que el soberano, una vez constituido por la voluntad general, era infalible y no tenía porqué proporcionarle garantías a sus súbditos, pues era improbable que “el cuerpo quiera perjudicar a sus miembros”.

Aunque, como dice Bobbio, Rousseau no ideó un Estado sin límites al poder. No olvidar que el engaño populista, identifican la concepción de la democracia de los socialistas del siglo XXI con esta idea roussoniana. Que claramente la quieren implantar en nuestro país, desde el punto de vista ciencia política, la consulta popular equivale a un sufragio popular, siendo este: el derecho político y constitucional a votar a los cargos públicos electos.

En un sentido amplio, el sufragio abarca el activo, donde se determina quiénes tienen derecho al voto; y el pasivo, que se refiere a quiénes y en qué condiciones tienen derecho a ser elegidos. Y hacer una consulta consiste en el proceso mental de juzgar los méritos de múltiples opciones y seleccionar una o más de entre ellas. Además es imprescindible la participación política, que es el conjunto de acciones llevadas a cabo por los ciudadanos que no están necesariamente involucrados en la política de forma directa, y cuya acción pretende influir en el proceso político en el resultado del mismo.

En otras palabras, la participación política describe actividades directas o indirectas que realizan los ciudadanos para influir en las decisiones o en la elección de los gobernantes y se puede llevar a cabo de forma convencional por ejemplo la participación electoral y el activismo partidario o de forma no convencional como las actividades de protesta y el contacto con las autoridades. Y como son los participantes Inactivos: tratándose de individuos que no ejercen ningún tipo de participación.

Conformistas: siendo éstos aquellos que solo participan de vez en cuando. Contestatarios: refiriéndose a los grupos de personas que se movilizan de forma directa. Reformistas: los grupos de personas que se movilizan de forma institucional. Activistas: Que se movilizan tanto de forma directa como institucional. Y además para su validez aquí en México hay una metodología, de acuerdo con la ley de consulta popular la debe solicitar, el presidente de la República, el equivalente al 33% de los integrantes de cualquiera de las cámaras del Congreso, o los ciudadanos en un número equivalente, al menos, al 2% de los inscritos en la lista nominal de electores, mínimo se requiere para su validez conocer los siguientes puntos:

Objetivo de la consulta (bien claro), su marco muestral, su diseño muestral, su tamaño de muestra, la población sujeta a estudio, procedimiento de estimación de resultados y hasta su software utilizado, y ¿dónde está? Y caemos en el populismo de afirmar: “Es la voluntad del pueblo construir otra pista al aeropuerto militar de Santa Lucía, aunque el Fondo de Investigación del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MITRE) haya determinado la interferencia del espacio aéreo que sólo provocaría accidentes.

Es la voluntad del pueblo otorgarle la amnistía a los malandros aunque hayan masacrado a cientos de miles de conciudadanos. El pueblo no se equivoca. Ab Absurdo: “Por el absurdo”.

tomymx@me.com