/ miércoles 8 de junio de 2022

Jóvenes volver a pensar

La hepatitis infecciosa tiene una amplia gama de causas, generalmente son infecciones virales, especialmente las causadas por los virus de la hepatitis A, B y C, pueden provocar la afección.

El consumo excesivo de alcohol, ciertos químicos tóxicos, algunos medicamentos y otras condiciones médicas también pueden causar hepatitis. Sin embargo, los niños generalmente son vacunados contra la hepatitis A, las que, inclusive se detectan por brotes en escuelas, por contaminación de ese virus, mientras que las hepatitis B y C son menos comunes en los niños debido a la forma en que se adquieren las infecciones, a menudo a través del contacto sexual o al compartir agujas.

Sin embargo, en la actualidad un extraño brote de hepatitis en casi 300 niños tiene a las autoridades sanitarias de Europa y Estados Unidos en un apuro por encontrar respuestas. La enfermedad no tiene una conexión conocida, pero se está investigando un posible vínculo con un virus que puede causar resfriados.

Las autoridades están investigando la posibilidad de que un adenovirus, uno de un grupo de virus comunes que pueden causar síntomas similares a los del resfriado, así como gastroenteritis, conjuntivitis y otras dolencias, pueda ser el responsable. Se han informado casos en al menos una docena de países, incluidos Dinamarca, Inglaterra, Francia, Irlanda, Israel, Italia, los Países Bajos, Noruega, Escocia, España y el Reino Unido.

En Estados Unidos también se han presentado casos confirmados o sospechosos en al menos seis estados del país. El problema de este tipo de hepatitis es que puede llegar a destruir funcionalmente el hígado y la única posibilidad de sobrevivir es de trasplante, diferente a la hepatitis común producida por el virus A, que generalmente es una infección autolimitada, y banal.

Sin embargo, hay que conocer los signos de hepatitis grave incluyen, fiebre prolongada, dolor abdominal intenso e ictericia, coloración amarillenta de la piel y los ojos; hay que observan a los niños que observen esos síntomas, y deben comunicarse de inmediato con el pediatra del niño. Los CDC (Centro de enfermedades infecciosas de EEUU) dice que todos los médicos deben estar atentos a los síntomas e informar cualquier caso sospechoso de lo que se llama hepatitis de origen desconocido. Omne scibile todo lo que se puede saber.

La hepatitis infecciosa tiene una amplia gama de causas, generalmente son infecciones virales, especialmente las causadas por los virus de la hepatitis A, B y C, pueden provocar la afección.

El consumo excesivo de alcohol, ciertos químicos tóxicos, algunos medicamentos y otras condiciones médicas también pueden causar hepatitis. Sin embargo, los niños generalmente son vacunados contra la hepatitis A, las que, inclusive se detectan por brotes en escuelas, por contaminación de ese virus, mientras que las hepatitis B y C son menos comunes en los niños debido a la forma en que se adquieren las infecciones, a menudo a través del contacto sexual o al compartir agujas.

Sin embargo, en la actualidad un extraño brote de hepatitis en casi 300 niños tiene a las autoridades sanitarias de Europa y Estados Unidos en un apuro por encontrar respuestas. La enfermedad no tiene una conexión conocida, pero se está investigando un posible vínculo con un virus que puede causar resfriados.

Las autoridades están investigando la posibilidad de que un adenovirus, uno de un grupo de virus comunes que pueden causar síntomas similares a los del resfriado, así como gastroenteritis, conjuntivitis y otras dolencias, pueda ser el responsable. Se han informado casos en al menos una docena de países, incluidos Dinamarca, Inglaterra, Francia, Irlanda, Israel, Italia, los Países Bajos, Noruega, Escocia, España y el Reino Unido.

En Estados Unidos también se han presentado casos confirmados o sospechosos en al menos seis estados del país. El problema de este tipo de hepatitis es que puede llegar a destruir funcionalmente el hígado y la única posibilidad de sobrevivir es de trasplante, diferente a la hepatitis común producida por el virus A, que generalmente es una infección autolimitada, y banal.

Sin embargo, hay que conocer los signos de hepatitis grave incluyen, fiebre prolongada, dolor abdominal intenso e ictericia, coloración amarillenta de la piel y los ojos; hay que observan a los niños que observen esos síntomas, y deben comunicarse de inmediato con el pediatra del niño. Los CDC (Centro de enfermedades infecciosas de EEUU) dice que todos los médicos deben estar atentos a los síntomas e informar cualquier caso sospechoso de lo que se llama hepatitis de origen desconocido. Omne scibile todo lo que se puede saber.