/ martes 2 de junio de 2020

La política es así

Incertidumbre y confrontación

Bajo la cobertura de los diferendos crecientes a que se hizo alusión en pasado artículo (26/05/20), emerge la incertidumbre al primer plano de la vida política nacional, ligada aquélla con una confrontación que no mengua.

Por el contrario, se acrecienta día con día e invade todos las espacios políticos, productivos y de interés convergentes en un país inmerso en una crisis sanitaria en coalición constante con la crisis económica, sobre la cual se difunden diferentes percepciones y alcances, cuyo final y daño directo o colateral a las instituciones y personas, no existe una medición con alto grado de certeza.

Una vez terminada oficialmente la Jornada Nacional de la Sana Distancia el pasado sábado 30 de mayo, se estableció previamente que las actividades económicas y sociales estarían reguladas por la semaforización impuesta a los Estados por la Federación.

Al terminar dicha jornada, se informó que la misma sólo a Zacatecas le favorecía al tener el semáforo color naranja, mientras que en el resto de las entidades federativas, prevalecería el de color rojo. Se agregó, además, por conducto del vocero oficial, que las restantes, podrían endurecer las medidas para evitar la propagación del covid-19, pero en ningún momento se podrían relajar o atenuar las mismas. O por lo menos así fue entendido.

Sin embargo, de acuerdo a la información proveniente de las entidades federativas, se toma nota que éstas tenderían a imponer sus propias reglas o medidas restrictivas con tendencia hacia lo alto pero también hacia la baja. En la semana que ayer se inició ya se verá cómo decidieron actuar las autoridades de las entidades federativas, y, sobre todo, si lo resuelto sirvió para disminuir los contagios y/o los decesos, así como si se reactivó la actividad económica de las mismas, a las cuales a todas ellas le beneficiará el hecho que se incluyeron como actividades esenciales (o sea, sin restricción alguna para operar) la minería, la industria de las autopartes (automotriz) y la construcción. Tal vez a no todas las entidades les beneficia la inclusión de las dos primeras (en diferentes magnitudes y localidades), pero sí de la construcción.

Ahora bien, dentro del contexto de la incertidumbre por el futuro que viene en todos los órdenes, destaca, en primer plano, la confrontación que se niega a desaparecer o a menguar, sino todo lo contrario, con el agregado que la misma ya rebasó la confrontación en materia económica entre los factores de la producción y el estado, como consecuencia de la política o políticas y de la visión del presidente para enfrentar la crisis económica que viene, en el entendido de que para él la pandemia ya está “domada”, y para demostrar su punto de vista, qué mejor que realizar una jira por el sureste con la finalidad de dar el banderazo de salida en varios tramos del Tren Maya, para así reactivar la economía, y cuya construcción ya fue licitada y otorgada a las compañías ganadoras, tal vez alguna de ellas ligada con la “mafia del poder”, a la cual el presidente prometió que separaría del poder político, para que así ésta ya no incidiera en la economía y viceversa. Ahora la confrontación se corrió al terreno fáctico.

En pocas palabras. Para el presidente, si ya terminó la sana distancia, puede realizar las giras que solía realizar antes de la pandemia y al principio de la misma, bajo la tesis de que, al parecer ya hizo suya, “gobernar es andar en gira constante”, para así conservar prosélitos, o sea, votos para las campañas que vienen del 2021 y del 2024. Ergo, si el presidente sale, ¿por qué los ciudadanos no podemos salir de la casa, e inclusive de viaje de recreo?

Por otra parte, ya colocados en el plazo estatal, si los gobernados toman nota de que el gobernador lo mismo va a Monterrey, que a Saltillo o a Colima o a cualquier otra ciudad capital de los siete estados cuyos titulares del poder ejecutivo se han coaligado para demandar más apoyo y recursos de la Federación, ¿por qué los gobernados no tendrían derecho a salir de sus hogares o de viaje a cualquier otra parte de la República?

Como decía un amigo: La mejor enseñanza significativa es la de “bulto”, la cual se puede dar en aspecto negativo o en el positivo.

Así las cosas, de los diferendos y de la confrontación, exacerbados por la parte opositora a través de los analistas considerados como integrantes del “círculo rojo”, fundamentalmente para contrarrestar la influencia de “las mañaneras”, cuyo efecto se traduce en el hecho de que, alrededor del 60% de los mexicanos, continúan como afines a la figura y a las acciones presidenciales, los integrantes de la oposición han constituido FRENA, cuyas siglas significan Frente Nacional contra AMLO, la cual se manifestó el pasado domingo en diferentes ciudades del país con caravanas de vehículos, con inclusión de la Ciudad de México; Frente, que, al decir de sus dirigentes, pretende que el presidente renuncie antes del 1 de diciembre próximo, lo cual no se va a dar por la simpatía hacia el presidente anteriormente cuantificada. O sea, de la palabra se pasó a los hechos.

Sin embargo, ello no evita para que los simpatizantes de la 4T se organicen en comités que se ha informado llegarán a tres mil, para así contrarrestar y enfrentar a los miembros de FRENA, lo cual no es buen augurio para propios y extraños, ya que se podría llegar a darse enfrentamientos por la vía de las hechos, más allá, mucho más allá de la confrontación política que por ahora se hace visible con FRENA y con los siete gobernadores casi casi en sesión permanente en su actitud opositora al presidente y a su gobierno.

El presidente, que no se cuece al primer hervor, con la experiencia adquirida en su larga vida política y opositora al poder presidencial, ya se dirigió a quienes demandan su renuncia y les dijo: “no coman ansias”, para luego agregar que su oposición la hicieran valer en las elecciones intermedias del 2021 y en el ejercicio de revocación de mandato que podría tener lugar en marzo del 2022.

Luego pues, sin tanto brinco y más que el suelo político está parejo desde el punto de la legalidad, más que por la vía de hechos que no es deseable, habría que mirar el futuro político del 2021 para que los partidos en el poder defiendan sus posiciones, así como para que los opositores le arrebaten a la 4T y al presidente la mayoría absoluta que ahora detenta en la Cámara de Diputados, así como para que venzan en las elecciones estatales mediante las cuales se renovarán los poderes en quince estados del país. Tienen tiempo para unirse, organizarse y ganar en las elecciones del 2021.

Localmente, cada gobernado valorará a su gobernante y decidirá qué hace o deja de hacer.

Incertidumbre y confrontación

Bajo la cobertura de los diferendos crecientes a que se hizo alusión en pasado artículo (26/05/20), emerge la incertidumbre al primer plano de la vida política nacional, ligada aquélla con una confrontación que no mengua.

Por el contrario, se acrecienta día con día e invade todos las espacios políticos, productivos y de interés convergentes en un país inmerso en una crisis sanitaria en coalición constante con la crisis económica, sobre la cual se difunden diferentes percepciones y alcances, cuyo final y daño directo o colateral a las instituciones y personas, no existe una medición con alto grado de certeza.

Una vez terminada oficialmente la Jornada Nacional de la Sana Distancia el pasado sábado 30 de mayo, se estableció previamente que las actividades económicas y sociales estarían reguladas por la semaforización impuesta a los Estados por la Federación.

Al terminar dicha jornada, se informó que la misma sólo a Zacatecas le favorecía al tener el semáforo color naranja, mientras que en el resto de las entidades federativas, prevalecería el de color rojo. Se agregó, además, por conducto del vocero oficial, que las restantes, podrían endurecer las medidas para evitar la propagación del covid-19, pero en ningún momento se podrían relajar o atenuar las mismas. O por lo menos así fue entendido.

Sin embargo, de acuerdo a la información proveniente de las entidades federativas, se toma nota que éstas tenderían a imponer sus propias reglas o medidas restrictivas con tendencia hacia lo alto pero también hacia la baja. En la semana que ayer se inició ya se verá cómo decidieron actuar las autoridades de las entidades federativas, y, sobre todo, si lo resuelto sirvió para disminuir los contagios y/o los decesos, así como si se reactivó la actividad económica de las mismas, a las cuales a todas ellas le beneficiará el hecho que se incluyeron como actividades esenciales (o sea, sin restricción alguna para operar) la minería, la industria de las autopartes (automotriz) y la construcción. Tal vez a no todas las entidades les beneficia la inclusión de las dos primeras (en diferentes magnitudes y localidades), pero sí de la construcción.

Ahora bien, dentro del contexto de la incertidumbre por el futuro que viene en todos los órdenes, destaca, en primer plano, la confrontación que se niega a desaparecer o a menguar, sino todo lo contrario, con el agregado que la misma ya rebasó la confrontación en materia económica entre los factores de la producción y el estado, como consecuencia de la política o políticas y de la visión del presidente para enfrentar la crisis económica que viene, en el entendido de que para él la pandemia ya está “domada”, y para demostrar su punto de vista, qué mejor que realizar una jira por el sureste con la finalidad de dar el banderazo de salida en varios tramos del Tren Maya, para así reactivar la economía, y cuya construcción ya fue licitada y otorgada a las compañías ganadoras, tal vez alguna de ellas ligada con la “mafia del poder”, a la cual el presidente prometió que separaría del poder político, para que así ésta ya no incidiera en la economía y viceversa. Ahora la confrontación se corrió al terreno fáctico.

En pocas palabras. Para el presidente, si ya terminó la sana distancia, puede realizar las giras que solía realizar antes de la pandemia y al principio de la misma, bajo la tesis de que, al parecer ya hizo suya, “gobernar es andar en gira constante”, para así conservar prosélitos, o sea, votos para las campañas que vienen del 2021 y del 2024. Ergo, si el presidente sale, ¿por qué los ciudadanos no podemos salir de la casa, e inclusive de viaje de recreo?

Por otra parte, ya colocados en el plazo estatal, si los gobernados toman nota de que el gobernador lo mismo va a Monterrey, que a Saltillo o a Colima o a cualquier otra ciudad capital de los siete estados cuyos titulares del poder ejecutivo se han coaligado para demandar más apoyo y recursos de la Federación, ¿por qué los gobernados no tendrían derecho a salir de sus hogares o de viaje a cualquier otra parte de la República?

Como decía un amigo: La mejor enseñanza significativa es la de “bulto”, la cual se puede dar en aspecto negativo o en el positivo.

Así las cosas, de los diferendos y de la confrontación, exacerbados por la parte opositora a través de los analistas considerados como integrantes del “círculo rojo”, fundamentalmente para contrarrestar la influencia de “las mañaneras”, cuyo efecto se traduce en el hecho de que, alrededor del 60% de los mexicanos, continúan como afines a la figura y a las acciones presidenciales, los integrantes de la oposición han constituido FRENA, cuyas siglas significan Frente Nacional contra AMLO, la cual se manifestó el pasado domingo en diferentes ciudades del país con caravanas de vehículos, con inclusión de la Ciudad de México; Frente, que, al decir de sus dirigentes, pretende que el presidente renuncie antes del 1 de diciembre próximo, lo cual no se va a dar por la simpatía hacia el presidente anteriormente cuantificada. O sea, de la palabra se pasó a los hechos.

Sin embargo, ello no evita para que los simpatizantes de la 4T se organicen en comités que se ha informado llegarán a tres mil, para así contrarrestar y enfrentar a los miembros de FRENA, lo cual no es buen augurio para propios y extraños, ya que se podría llegar a darse enfrentamientos por la vía de las hechos, más allá, mucho más allá de la confrontación política que por ahora se hace visible con FRENA y con los siete gobernadores casi casi en sesión permanente en su actitud opositora al presidente y a su gobierno.

El presidente, que no se cuece al primer hervor, con la experiencia adquirida en su larga vida política y opositora al poder presidencial, ya se dirigió a quienes demandan su renuncia y les dijo: “no coman ansias”, para luego agregar que su oposición la hicieran valer en las elecciones intermedias del 2021 y en el ejercicio de revocación de mandato que podría tener lugar en marzo del 2022.

Luego pues, sin tanto brinco y más que el suelo político está parejo desde el punto de la legalidad, más que por la vía de hechos que no es deseable, habría que mirar el futuro político del 2021 para que los partidos en el poder defiendan sus posiciones, así como para que los opositores le arrebaten a la 4T y al presidente la mayoría absoluta que ahora detenta en la Cámara de Diputados, así como para que venzan en las elecciones estatales mediante las cuales se renovarán los poderes en quince estados del país. Tienen tiempo para unirse, organizarse y ganar en las elecciones del 2021.

Localmente, cada gobernado valorará a su gobernante y decidirá qué hace o deja de hacer.

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