Ahora entendemos, porque en su campaña López Obrador decía: “En México, si llego a la presidencia de la República se van a terminar los privilegios” estamos viendo cosas, que ningún presidente de México se había atrevido a hacer.
Para empezar, figuras de la crema y nata de la política nacional están en serios problemas legales. Empresarios del jet set, de la farándula, de Hola, Forbes y otras revistas frívolas están prófugos de la justicia, otros, en prisión preventiva, como medida cautelar en espera de la audiencia inicial ante un juez de control para dar inicio a sus juicios.
Esto debido a la investigación y lucha legal de la organización Fundar. Para variar, esta organización ha desenmascarado a políticos, empresarios, ídolos del pueblo, artistas de telenovelas que nos han hecho llorar por décadas en las tardes viendo el televisor y ahora resulta que no pagan impuestos y aunque usted no lo crea, esto ha sido legal. Pero ahora con la Reforma al artículo 28 Constitucional, esa forma de robar a la Nación se acabó.
Como dice la canción: “Quién iba a pensar, quien, quien” que figuras como Carlos Salinas de Gortari, Diego Fernández de Cevallos les hayan perdonado miles de millones de pesos de impuestos.
Del “Jefe Diego” nos enteramos que le adeuda al Gobierno Municipal de Querétaro mil millones de pesos por el predial y a nosotros, simples mortales, nos piden por adelantado el impuesto de nuestras actas de defunción.
Parafraseando el título de una película: Ustedes los ricos no pagan impuestos y nosotros los pobres sí. ¿Qué les parecería una nueva versión cinematográfica dirigida por Alfonso Cuarón, con la participación de la primera actriz Angélica Rivera y el primer actor Diego Fernández de Cevallos y en la producción, la Comisión Federal de Electricidad y el grupo Carso? Y no es sólo que le perdonen miles de millones de pesos a la gente rica y poderosa de este país, también es importante, si hubo “moches” para no cobrarles impuestos.
Lo grave de todo esto es que el artículo 28 Constitucional le daba facultades al presidente de la República en turno, para beneficiar a un puñado de amigos y familias, en perjuicio de millones de mexicanos. ¿Para eso quieren “partirle la madre a la 4T”? ¿Para regresar a otra película, “nosotros los nobles”?.
Decía el clásico: “Aún hay más”. Hoy se vuelve a comentar lo que en el mes de mayo publicó, un periódico de la Ciudad de México, dando a conocer muchas empresas nacionales y trasnacionales, que gracias a sus demandas de amparo no ha sido posible conocer los nombres de los dueños y sus socios.
Según este medio, empresas como Liverpool, Televisa, TV Azteca, Grupo Carso, Mineras Mexicanas y extranjeras les fueron perdonadas sus impuestos. Los ricos de este país no cumplen sus obligaciones fiscales pero esos sí, son los primeros en decir, que la 4T que pretende el gobierno de López Obrador, “hay que partirle la madre” para que todo vuelva como antes en México, “casi el paraíso”. Ya lo dijo Juan Gabriel: “Que ni vergüenza tienen”.
