/ domingo 7 de agosto de 2022

¿Otra vez tú, Marko?

Marko Cortés, presidente nacional del PAN, no desaprovecha oportunidad para ser noticia en los medios nacionales. La última vez fue en el pasado proceso electoral de 2022. En esa ocasión, casi tuvo boca de profeta: el PAN ganó en Aguascalientes y el PRI en Durango. Y aunque Felipe Calderón Hinojosa le reviró que estaba “saboteando la alianza y de una bajeza”, Marko Cortés no se dio por aludido. Muchos, desde el triunfo del PRI y de Esteban Villegas Villareal, piensan que el “modelo Durango” se puede exportar al Estado de México, y ya encarrerado el gato, a la presidencial en 2024. Al menos así lo piensan los operadores electorales de Esteban, Héctor Valenzuela y el “Gato” Adame. Cómo olvidar el caso Aguascalientes cuando rescataron al PT.

Pero no es lo mismo atrás que en ancas. En Durango, el PRI fue el director de la orquesta, y los músicos el PAN y el PRD, sin embargo, el Estado de México es otra historia. Aquí en nuestro Estado, sólo se jugaron los intereses que representa una gobernatura, los grupos políticos tradicionales, las mismas familias, la cúpula empresarial y los poderes fácticos locales. A diferencia del estado de México, está en juego la presidencia de la República. Aunque no lo diga Marko Cortés, piensa que su “madruguete” pondrá de rodillas al PRI y al PRD en ese estado, y como dicen, si es pasión que se le borre. Si aquí en Durango se impuso la lógica de los votos, en aquel estado debería ser lo mismo. Si bien el Estado de México tiene un padrón de 12 millones de electores, en la pasada elección para gobernador sólo votaron 6 millones.

Revisando un poco los números de aquella elección, el PAN fue el partido perdedor al obtener solamente 682 mil, 571 votos y así Marko Cortés no puede exigir que el PAN encabece la alianza, como lo intentó hacer en Durango. Si los números y los votos mandan, entonces quien tiene más posibilidades de encabezarla sería el PRI. Este partido obtuvo dos millones 40 mil votos, superando a Delfina Gómez con 169 mil, esto haciendo una diferencia de 2.78 por ciento. Delfina se quedó con un millón 871 mil 542 votos. En tercer lugar, el PRD con un millón 84 mil votos y en cuarto lugar el PAN con únicamente 682 mil votos. Con estos números a Marko Cortés no se le puede impedir soñar… pero quién quite.

El grupo de Atlacomulco, el que está atrás del gobernador Alfredo del Mazo, desde ahora podemos decir que será el fiel de la balanza en el estado de México. Si Alito, llegado el momento, es aún presidente nacional del PRI, si aquí en Durango “nomás sus chicharrones tronaron”, en la tierra de Adolfo López Mateos será todo lo contrario.

Por cierto, Alfredo del Mazo podría en 2024 encabezar la alianza Va Por México y por esta razón, no puede darse el lujo de perder su Estado y más aún, sabiendo que la candidata de Andrés Manuel López Obrador es Delfina Gómez. Es mucho lo que está en juego, para que Marko Cortés piense que su estrategia le funcionará.

A diferencia de Durango, en el estado de México el PRD sí será tomado en cuenta a la hora de opinar. No se puede dejar de comentar algunos detalles en este contexto: el PRI ha venido perdiendo votos del 2011 a la fecha, en ese año perdió un millón de votos. En la pasada elección las mujeres y los jóvenes decidieron los resultados. El 37 por ciento de las mujeres voto por del Mazo y el 28 porciento voto por Delfina Gómez. En cambio, lo jóvenes, le dieron a Delfina el 34 por ciento, y al actual gobernador el 30 por ciento. Esta elección dará mucho de qué hablar, pero el día de hoy no hay nada para nadie.

Marko Cortés, presidente nacional del PAN, no desaprovecha oportunidad para ser noticia en los medios nacionales. La última vez fue en el pasado proceso electoral de 2022. En esa ocasión, casi tuvo boca de profeta: el PAN ganó en Aguascalientes y el PRI en Durango. Y aunque Felipe Calderón Hinojosa le reviró que estaba “saboteando la alianza y de una bajeza”, Marko Cortés no se dio por aludido. Muchos, desde el triunfo del PRI y de Esteban Villegas Villareal, piensan que el “modelo Durango” se puede exportar al Estado de México, y ya encarrerado el gato, a la presidencial en 2024. Al menos así lo piensan los operadores electorales de Esteban, Héctor Valenzuela y el “Gato” Adame. Cómo olvidar el caso Aguascalientes cuando rescataron al PT.

Pero no es lo mismo atrás que en ancas. En Durango, el PRI fue el director de la orquesta, y los músicos el PAN y el PRD, sin embargo, el Estado de México es otra historia. Aquí en nuestro Estado, sólo se jugaron los intereses que representa una gobernatura, los grupos políticos tradicionales, las mismas familias, la cúpula empresarial y los poderes fácticos locales. A diferencia del estado de México, está en juego la presidencia de la República. Aunque no lo diga Marko Cortés, piensa que su “madruguete” pondrá de rodillas al PRI y al PRD en ese estado, y como dicen, si es pasión que se le borre. Si aquí en Durango se impuso la lógica de los votos, en aquel estado debería ser lo mismo. Si bien el Estado de México tiene un padrón de 12 millones de electores, en la pasada elección para gobernador sólo votaron 6 millones.

Revisando un poco los números de aquella elección, el PAN fue el partido perdedor al obtener solamente 682 mil, 571 votos y así Marko Cortés no puede exigir que el PAN encabece la alianza, como lo intentó hacer en Durango. Si los números y los votos mandan, entonces quien tiene más posibilidades de encabezarla sería el PRI. Este partido obtuvo dos millones 40 mil votos, superando a Delfina Gómez con 169 mil, esto haciendo una diferencia de 2.78 por ciento. Delfina se quedó con un millón 871 mil 542 votos. En tercer lugar, el PRD con un millón 84 mil votos y en cuarto lugar el PAN con únicamente 682 mil votos. Con estos números a Marko Cortés no se le puede impedir soñar… pero quién quite.

El grupo de Atlacomulco, el que está atrás del gobernador Alfredo del Mazo, desde ahora podemos decir que será el fiel de la balanza en el estado de México. Si Alito, llegado el momento, es aún presidente nacional del PRI, si aquí en Durango “nomás sus chicharrones tronaron”, en la tierra de Adolfo López Mateos será todo lo contrario.

Por cierto, Alfredo del Mazo podría en 2024 encabezar la alianza Va Por México y por esta razón, no puede darse el lujo de perder su Estado y más aún, sabiendo que la candidata de Andrés Manuel López Obrador es Delfina Gómez. Es mucho lo que está en juego, para que Marko Cortés piense que su estrategia le funcionará.

A diferencia de Durango, en el estado de México el PRD sí será tomado en cuenta a la hora de opinar. No se puede dejar de comentar algunos detalles en este contexto: el PRI ha venido perdiendo votos del 2011 a la fecha, en ese año perdió un millón de votos. En la pasada elección las mujeres y los jóvenes decidieron los resultados. El 37 por ciento de las mujeres voto por del Mazo y el 28 porciento voto por Delfina Gómez. En cambio, lo jóvenes, le dieron a Delfina el 34 por ciento, y al actual gobernador el 30 por ciento. Esta elección dará mucho de qué hablar, pero el día de hoy no hay nada para nadie.