Falta estrategia
La esencia del contrato social en México, el bálsamo que apacigua los ánimos, concilia los espíritus y resuelve las contradicciones, es el dinero estatal.- Gabriel Zaid; El progreso improductivo
No se percibe en el discurso de la política nacional claridad de rumbo, se confía que distribuyendo dinero en forma directa a individuos aumentará la demanda de alimentos, ropa y la ocupación en sectores populares y gente del campo.
No se tiene ciencia cierta de la capacidad productiva para satisfacer el mercado interno, o poder solventar los requerimientos de nuestra dependencia tecnológica en la planta productiva, para reducir importaciones y elevar exportaciones. Los índices económicos como el Indicador Global de Actividad Económica, IGAE- INEGI, la comisión para evaluar el crecimiento económico del congreso o el instituto para el desarrollo industrial y crecimiento económico del Tec de Monterrey campus Edo de México, documentan que el 75 por ciento de los componentes de productos que exportamos son importados por maquiladoras o empresas extranjeras o asociadas a nacionales.
La guerra comercial inicia. Los EE.UU. eliminan los aranceles al acero y aluminio para México y Canadá, previniendo reacciones de China por alza de impuestos a sus exportaciones. De Perogrullo, estamos en la órbita de los EE.UU, y Alfonso Romo, el empresario regiomontano y jefe de la oficina de Palacio Nacional, declaró que míster Pompeo, del Departamento de Estado Norteamericano, le pidió que se no recibieran inversiones chinas. Esa correlación de fuerzas la entiende cualquiera.
Sorprende que el Bicentenario en sus giras de promoción, dos veces a Europa y China no parara en mientes. En dos giras el secretario de Desarrollo Económico ha dicho que van por plantas automotrices, así de fácil, sin más datos para que no les ganaran la inversión estados vecinos.
Todavía en el sexenio anterior se dejó inconclusa la construcción de Dragón Mart, en Yucatán que en 400 has, sería un polo de distribución de productos chinos a toda Centroamérica. Igual presión se recibió en la construcción del tren rápido CDMX-Querétaro, proyecto que ganaron los asiáticos y que el gobierno los indemnizó en daños y perjuicios por la cancelación de la obra.
Dos ejemplos del control norteamericano sin necesidad de pensar mucho las consecuencias que habría en nuestra relación comercial con ellos. Muy extraño, para ser amables, que el Gobierno del Estado no le diera importancia, ni el secretario de ramo, representante de las mineras canadienses que tiene a sueldo a titulares de fundos mineros para que exploten su propia riqueza en provecho de los canadienses.
La aldea global de Marshall Mcluhan configura un escenario mundial con influencia nacional y local no bien concebidas por el Bicentenario. Proliferan las ofertas chinas, en dado caso que no podrían los EE.UU. ofrecer los mismos precios. La guerra comercial por el mercado mundial tomó forma a partir de la crisis inmobiliaria del 2008 y que aún persiste, en los EE.UU, la quiebra de Lehman Brothers, de Ford, etc, rebasaron al individualismo de la libre empresa, y por un voto en Senado aprobó rescatar esas empresas con 700,000 mdd de fondos públicos.
Los demócratas se impusieron al viejo paradigma individualista de los republicanos enemigos de la intervención del Gobierno en la esfera privada, decían se subsidiaría la incompetencia y caer en el paternalismo oficial. Pero los hechos, seguido le ponen los cuernos a las ideas, la inversión china y japonesa bajo su pies, obligó al gobierno a rescatar la libre empresa de la vieja ultranza liberal.
Leo Huberman, autor de Los Límites del Crecimiento, coincidiría Joseph Stiglitz, Paul Krudman, premios Novel de economía, de que el liberalismo y su libre comercio obligó a las naciones a sostener el nacionalismo en defensa de su economía y de baluarte de su nacionalismo e identidad cultural. Dice Andrés Oppenheimer, que sálvese quien pueda en esta guerra de productividad en robótica, cibernética y biotecnología.
El Gobierno de la República es muy fuerte legalmente y de hecho, cuenta con varios instrumentos financieros y el gasto público para domeñar a una empresa privada limitada y dependiente del capital extranjero. Lo demuestran la docilidad ante la cancelación de la inversión en el magno aeropuerto, o las revelaciones de los privilegios fiscales a empresarios monopolistas, y los dineros la periodistas faltando lo dado a empresas editoriales.
Condiciones que se reproducen en mayor grado con el gobierno local en una entidad muy pobre con un presupuesto público que depende en un 93% de los recursos federales. Constructores, comerciantes, partidos y buenos para nada dependen del presupuesto del estado.
