/ martes 3 de agosto de 2021

Riesgo de ruptura

Mientras que está latente el riesgo de una ruptura en la coalición electoral entre PRI y PAN con miras a la elección para gobernador en el 2022, en el ámbito legislativo continúa vigente el proyecto de mantener la alianza a partir del primero de septiembre, más cuando a Acción Nacional ya le redujeron su fracción a 5 diputados.

Militantes panistas “de peso”, impulsan la idea de “romper” alianza electoral con el Revolucionario Institucional, bajo la consideración de que aún solos tienen posibilidades de alcanzar más espacios, garantizado por el voto duro que mantienen en la mayoría de los municipios, y más en la capital.

Sin embargo, entre las dirigencias estatal y nacional de este partido, continúa la intención de refrendar la coalición y se cumpla con lo convenido previamente: Que en Durango al existir un gobierno panista, el candidato o candidata a gobernador del PRI-PAN tendría que ser blanquiazúl. Y se dejaría para la Presidencia Municipal de la capital a un priista.

La bancada panista en el Congreso local será lidereada por Verónica Pérez, quien además seguirá al frente del Comité Directivo Estatal del PAN hasta el 2023 en que termina su período estatutario, pese a las voces de militantes que demandan su salida, bajo el argumento de que no sería ético ocupar ambas posiciones.

Y es que si fueran solos le allanarían en mucho el terreno a Morena, que de acuerdo a resultados de encuestas conserva la delantera en la intención del voto para la gubernatura, más si se coaliga con el Partido del Trabajo y el Verde. De ir juntos tricolores y azules, la competencia sería más cerrada.

El escenario que se vislumbra en la elección para suceder a José Rosas Aispuro, en caso de persistir la ruptura de panistas y priistas, sería el siguiente: Al parecer en Morena por la paridad de género, su candidata será mujer, lo que le dejaría el camino casi libre a Marina Vitela, alcaldesa de Gómez Palacio. En los estudios de preferencia del voto, la senadora Margarita Valdez queda muy abajo, lo mismo que Maribel Aguilera.

En el PRI los sondeos arrojan que el mejor posicionado es Esteban Villegas. Y en el PAN, desde ahora el trabajo político se enfoca en recuperar la imagen perdida del alcalde Jorge Salum.

Otros posibles candidatos serían Óscar García Barrón de Movimiento Ciudadano, aunque se dice que estudian la posibilidad de ir en coalición con alguno de los partidos predominantes. Se quedarían con las ganas, el petista Alejandro González y los morenistas José Ramón Enríquez y Manuel Espino.

En el PRI, luego de la desafortunada declaración del virtual dirigente estatal, Arturo Yáñez de incumplir con el pacto de coalición que tienen con el PAN, y pelear por que el candidato sea priista. Se espera que en la visita a Durango de Alejandro Moreno, líder nacional, se aclare si persiste la intención de ir en coalición en el 2022.

Mientras que está latente el riesgo de una ruptura en la coalición electoral entre PRI y PAN con miras a la elección para gobernador en el 2022, en el ámbito legislativo continúa vigente el proyecto de mantener la alianza a partir del primero de septiembre, más cuando a Acción Nacional ya le redujeron su fracción a 5 diputados.

Militantes panistas “de peso”, impulsan la idea de “romper” alianza electoral con el Revolucionario Institucional, bajo la consideración de que aún solos tienen posibilidades de alcanzar más espacios, garantizado por el voto duro que mantienen en la mayoría de los municipios, y más en la capital.

Sin embargo, entre las dirigencias estatal y nacional de este partido, continúa la intención de refrendar la coalición y se cumpla con lo convenido previamente: Que en Durango al existir un gobierno panista, el candidato o candidata a gobernador del PRI-PAN tendría que ser blanquiazúl. Y se dejaría para la Presidencia Municipal de la capital a un priista.

La bancada panista en el Congreso local será lidereada por Verónica Pérez, quien además seguirá al frente del Comité Directivo Estatal del PAN hasta el 2023 en que termina su período estatutario, pese a las voces de militantes que demandan su salida, bajo el argumento de que no sería ético ocupar ambas posiciones.

Y es que si fueran solos le allanarían en mucho el terreno a Morena, que de acuerdo a resultados de encuestas conserva la delantera en la intención del voto para la gubernatura, más si se coaliga con el Partido del Trabajo y el Verde. De ir juntos tricolores y azules, la competencia sería más cerrada.

El escenario que se vislumbra en la elección para suceder a José Rosas Aispuro, en caso de persistir la ruptura de panistas y priistas, sería el siguiente: Al parecer en Morena por la paridad de género, su candidata será mujer, lo que le dejaría el camino casi libre a Marina Vitela, alcaldesa de Gómez Palacio. En los estudios de preferencia del voto, la senadora Margarita Valdez queda muy abajo, lo mismo que Maribel Aguilera.

En el PRI los sondeos arrojan que el mejor posicionado es Esteban Villegas. Y en el PAN, desde ahora el trabajo político se enfoca en recuperar la imagen perdida del alcalde Jorge Salum.

Otros posibles candidatos serían Óscar García Barrón de Movimiento Ciudadano, aunque se dice que estudian la posibilidad de ir en coalición con alguno de los partidos predominantes. Se quedarían con las ganas, el petista Alejandro González y los morenistas José Ramón Enríquez y Manuel Espino.

En el PRI, luego de la desafortunada declaración del virtual dirigente estatal, Arturo Yáñez de incumplir con el pacto de coalición que tienen con el PAN, y pelear por que el candidato sea priista. Se espera que en la visita a Durango de Alejandro Moreno, líder nacional, se aclare si persiste la intención de ir en coalición en el 2022.