Hoy debe haber elecciones en el PAN de Santiago Papasquiaro. Por el lado del poder, o sea, con el apoyo del presidente electo, la juega Mateo Cháidez y por el otro lado, la señora Samay del Socorro Méndez.
Si hay justicia debe ganar la señora.
¿Pero, hay justicia?
Pedrito Ávila quiere que regalen el agua en los domicilios, que alguien le diga que Dios da el agua pero no la entuba.
Ulises Ruiz desistió de su candidatura al Comité Nacional del PRI y se une a Ivonne a Ortega, con la esperanza de que juntos le puedan ganar al campechano Alejandro Moreno.
Pues a ver si así.
El que va a la feria anda sin feria.
Insisten para que AMLO proceda contra Peña Nieto.
Aquí le insistieron a Aispuro para que procediera contra Herrera Caldera.
Tal vez en ambos casos haya elementos, ¿pero las pruebas?
Y hablando de Ulises, el de San Juan de Guadalupe, Ulises Adame, debe ser aprovechado en la administración de Marina Vitela.
Ambos proceden del PRI, ambos tienen lo suyo, ambos merecen estar en la nómina, en el caso de Ulises Adame, recorrió mucha lona en el tricolor: diputado local, diputado federal, secretario de Desarrollo Social, representante del gobierno y en Morena corrió con mal suerte: sonaba para senador y no fue, luego para diputado federal, tampoco.
Finalmente lo postularon para alcalde de Lerdo y se encontró con el fuego amigo.
Le ha ido mal, pero de que es valioso, eso que ni que.
Tan seguro se siente Daniel Sifuentes como alcalde electo de Nombre de Dios que no pela a nadie. No concede entrevistas, no asiste a cursos, no asoma las narices.
Tal actitud parecería la de alguien engreído, alguien que se siente la gran cosa. Y si esa conducta sigue como presidente municipal, especialmente después de la actuación positiva de Juan Solís, al agrónomo perredista le auguramos malos tiempos.
Si usted se fija, la debacle del PRI se inició con la imposición de Carlos Salinas de Gortari en 1988.
Y así como va, creo que ya solamente espera la última paletada de tierra que le van a dar los paleteros, no los paleros.
Duró como 15 años Pedro Silerio buscando la CNC. Y le llegó cuando más hodida está la organización.
Pero ahí está firme, con sacrificios, pensando como nosotros que hay un futuro halagüeño a su favor.
El PRI no tiene otro candidato a diputado federal por el tercer distrito.
Si es el conetense, le gana a quien le ponga de cualquier otro partido.