Durango no sólo tiene un camello híbrido de burro en Ricardo Karam, tiene otras especies híbridas a saber: un gallo, Jorge Mojica, un chivo, Felipe Cortez y un gato, Guillermo Adame, todos ellos que son también burros egresados del Tecno.
Mañana a eso de las 19 horas, los trabajadores de la Secretaría de Salud Pública sabrán ya quién es su nuevo dirigente sindical.
Los nomios apuntan a Óscar Chávez y Gabriel Torres, en ese orden de posibilidades.
Y en posibilidad muy pero muy remota, Miriam Vargas, la actual dirigente que está tan bien colada con el Comité Nacional que le permitieron hacer campaña sin renunciar a la Secretaría General.
Hoy a eso de las 9 horas el Ayuntamiento deberá conocer la propuesta del alcalde para prolongar por 7 años al comité del Parque del Zoológico, si prospera, de seguro se hará el tan traído y llevado restaurante, que a decir de muchos, habría entrado sin problemas si se hubiera propuesto cuando Enríquez las traía todas con él.
Hoy deben pasar tres cosas, o que no presente la propuesta, o que la presente y se la rechacen o que la presente y se la aprueben, lo que demostraría que en sus últimos días todavía trae con queso las gordas de Sauces.
Aquí le va una de cal para la ‘Cuarta transformación’:
Existe una dependencia que se llama Registro Agrario Nacional (RAN).
Encargada de justificar las pertenencias agrarias de la gente.
Ante un funcionario recurrió un ejidatario para pedir una copia de sus certificado de derechos.
Dijeron que estaba bien, se comunicaba y la respuesta está en trámite. Pasado un año y tras obtener la misma respuesta y sospechando que le había visto la cara de guaje, se apersonó en las oficinas que están aquí cerquita, llamó por teléfono a su celular al teléfono privado del RAN y desde su celular vio que le pasaron la llamada al funcionario, que colgó, y la recepcionista que le recibió la llamada le dijo que estaba fuera de la ciudad.
Se metió a la oficina a la brava y le reclamó al funciono aireadamente, éste se puso libido y tuvo que confesarle que había perdido su solicitud pero que empezaran de nuevo y fue a pagar el impuesto respectivo.
Ya en el regreso, él confió su caso a una señora que estaba en el escritorio a la entrada, y ésta le dijo, sígame, esto debe saberlo la delegada.
Cuando la delegada conoció del caso, le dijo que tiene 15 días aquí y vino para terminar con tantas anomalías que registraba esa oficina.
Ayer ya no estaba el funcionario y el campesino expresa sus felicitaciones al presidente AMLO, que cuando menos en este caso sí cumple.
Y no atestiguo con muertos.