Una mujer camina por la calle hasta detenerse en laentrada de un motel, observa a una pareja aproximarse, una cara leparece conocida. La pareja entra y pide una habitación, es elmomento en que la mujer ha resuelto también ingresar y saber dequién es ese rostro familiar.
En cuanto ella pone un pie dentro delestablecimiento, el rostro de la mujer se endurece y su cóleraexplota, se quita una de las zapatillas que porta y comienzagolpear al hombre con quien ha compartido más de 20 años dematrimonio. El esposo estaba con una mujer más joven, con quienpensaba celebrar el 14 de febrero.
Este es uno de los tantos momentos que ha vividoLiliana García en su trabajo, empleada de un motel de paso,ubicado en el centro de la Ciudad de México y quien detalló queen ese lugar es común que las personas acudan con otras personasque no son sus parejas.
El festejo por el Día de San Valentín comienza eneste sitio desde los primeros minutos de ese día. Por la madrugadaacuden parejas entre 30 y 40 años, conforme amanece llegan parejasjóvenes de 20 años aproximadamente y en las tardes lo ocupanmayores de 60 años.
De acuerdo con la empleada del motel, en dicho díauna habitación se ocupa de tres a cinco veces, la cual se limpiadespués de cada salida de los huéspedes; se cambian ropa de camay toallas, se limpian y desinfectan el cuarto y el baño consanitizantes que se utilizan en los quirófanos, lo cual esobligado por salubridad.
En esta fecha, el motel no cuenta con promociones,por el contrario, se reducen las horas de estancia; el costo porhabitación es de 305 pesos y solo obsequian a sus clientes unoschocolates o dulces como detalle.
La afluencia se intensifica a partir de las 09:00horas, cuando las personas han dejado a los niños en la escuela ytienen tiempo para “desbordar la pasión”, posteriormente bajaun poco y se vuelve a acentuar después de las 17:00 horas,cuando salen de sus trabajos para “relajarse”.
Liliana García comenta que el amor no sólo llega enpareja, sino en paquete de tres, porque a pesar de lo se cree “esuna práctica común”. Llegan a ingresar dos mujeres con unhombre y dos hombres con una mujer, aunque lo segundo es máscomún.
El establecimiento no discrimina la diversidadsexual, por lo que también hospeda a integrantes de la comunidadLésbico, Gay, Bisexual, Transexual, Transgénero, Travesti(LGBTTT), quienes suelen ser clientes frecuentes, en su mayoríahomosexuales y que en este día no faltan a la celebración.
Así, a pesar de ser una fecha para festejar el amor,los clientes no siempre acuden con sus parejas formales, "tal es elcaso de un señor que sospechaba que su esposa le era infiel ydecidió seguirla hasta el motel, entrar a la habitación donde seencontraba y sacarla literalmente de las greñas”, finalizóGarcía.
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