En redes sociales se viralizó la historia de un menor de 14 años de edad, que vende dibujos para ayudar a su mamá con los gastos de la casa ya que su situación familiar es bastante complicada.
Se trata de un joven venezolano llamado Samuel Andrés Mendoza, cuya pasión es el dibujo. Por ello aprovechó su pasatiempo para vender sus obras en internet, un negocio que le ha resultado bastante positivo.
Pero todas las ganancias que obtiene las destina para su mamá, ya que la señora hace frente a la severa desnutrición que le ha sido diagnosticada a su hijo.
Debido a la crisis social y económica que se vive en Venezuela la familia tuvo que emigrar a Colombia en el año 2019. En ese momento el niño, que también padece Síndrome de Asperger, fue diagnosticado con desnutrición. Por ello, su mamá Magdalena debía encontrar la manera de solucionar la situación.
Sin embargo, en diciembre de ese mismo año se vieron obligados a regresar a su país luego de que la mujer perdiera su trabajo tras un altercado en el que algunos miembros de la comunidad migrante donde vivían.
Pero una vez que llegaron a Venezuela, los problemas crecieron con ante la llegada de la pandemia. La dieta especial de Samuel –que debe ser rica en proteínas con seis comidas al día– era complicada de seguir debido a los problemas económicos de la nación sudamericana.
En su desesperación, Magdalena uso su cuenta de Twitter para buscar empleo y encontró un trabajo de limpieza, pero su sueldo no le era suficiente para solventar los gastos y los alimentos especiales que requería el menor.
Ante la difícil situación y la angustia de su madre, el niño decidió comenzar con su negocio de vender dibujos por internet y obtener una ganancia extra. Lo hizo a través de su cuenta de Twitter, en la que realizó una publicación donde se leía lo siguiente: "Vendo mis dibujos a un dólar para ayudar a mi mama con mi dieta, comprarle una casa y una bodega para que no trabaje en la calle y se enferme de Covid y comprarme una mantequilla de maní para mí”.
Inmediatamente la publicación se viralizó y comenzaron a lloverle clientes. La historia llegó incluso hasta el reconocido muralista venezolano Oscar Olivares, quien lo becó en su academia de arte.
Asimismo, los internautas lo han apoyado al regalarle una computadora portátil, juegos de lápices de colores y mucha mantequilla de maní rica en proteínas para su dieta especial.
Finalmente su mamá señaló a través de su cuenta de Twitter que está muy orgullosa de él, "pero, sí a veces siento rabia, siento impotencia, porque creo que a su edad él tiene que estar aprendiendo, estudiando y no queriendo trabajar para él querer ayudarme a mí cuando soy yo la que tengo que hacer todo lo posible por darnos la comodidad”, concluyó.
