El 2021 es un año complicado para el campo derivado de la situación de sequía que presenta el estado, se estima que 260 mil hectáreas fueron afectadas y también se dieron brotes de plaga, indicó el presidente de la Confederación de Productores Forestales del estado de Durango, Raúl Barraza Amstrong.
El forestal comentó que afortunadamente llegó la lluvia y con ello se espera que todo se normalice, pues con la sequía se registraron algunos brotes de plaga como el gusano barrenador que se concentró en la región de Otinapa y el Tecuán, y que a la fecha se sigue combatiendo.
Son cerca de 50 hectáreas las que han sido afectadas por la plaga de manera dispersa, sin embargo el problema no es grave.
Al hablar sobre incendios forestales, Barraza Amstrong, señaló que se encuentran en el proceso de recabar la información generada por las brigadas rurales para conocer la afectación, “pero fue un año muy complicado, se calcula que fueron 260 mil hectáreas afectadas, 30% de estos es arbolado joven y renuevo, lo demás pastizal”.
