Con bandas, mariachis y danzas, desde la madrugada de este jueves miles de duranguenses se dieron cita en el templo de San Judas Tadeo para conmemorarlo como el santo patrono de las causas difíciles, el cual es venerado desde la persona más humilde, hasta el más adinerado.
Judas Tadeo fue, según diversos textos neotestamentarios, uno de los discípulos de Jesús de Nazaret, que formaba parte del grupo de los 12 apóstoles. Se le menciona en los Evangelios como hermano de Jesús.
El sacerdote Juan Carlos Quiroga, encargado del templo San Judas Tadeo, ubicado en la colonia Héctor Mayagoitia, declaró que desde el miércoles comenzaron a llegar los fieles a dar gracias y a pagar la mandas que le hicieron al patrono de las cusas difíciles o incluso muchas de estas, imposibles.
El sacerdote recordó que el año pasado se suspendió la fiesta patronal, ya que la medidas sanitarias de la Covid-19 les impedía tener este tipo de actividades, sin embargo la gente ya estaba ansiosa por acudir al templo para festejar a su santo.
Como Martha Granados, quien desde que niña es devota a este santo y todos los años acude a llevar flores, una veladora y a pedir salud para su familia, una petición que hace a diario desde su casa a través de la oración, gracias a eso tiene salud, trabajo no solo para ella, sino para sus hijos y nietos, quienes siguen la tradición familiar.
Por su parte Enrique Valenzuela Domínguez, es el encargado de mantener el orden en la pequeña capilla que se encuentra contigua al templo, hasta donde fieles arriban para cantarle las mañanitas y dedicarle una oración, le ofrecen flores y veladoras para pedir por salud y trabajo.
En 10 años Enrique ha visto pasar muchas personas por el lugar, sobre todo los días 28 de octubre, cuando el lugar se desborda, pero esta celebración es diferente, “el año pasado no abrimos por la pandemia y este con trabajos nos dejaron, pero ya vinieron los inspectores a sanitizar el lugar y a revisar que estamos cumpliendo con las medidas”, dijo y ordenó a quienes estaban ahí salir por la puerta lateral para dar paso a otro grupo de fieles.
En entrevista, el sacerdote afirmó que cuando menos se espera la afluencia de cinco mil católicos aunado a otro número importante de comerciantes que hoy sí pudieron instalarse en las calles de aledañas al tempo, el cual desde hace 30 años lleva el nombre de San Judas Tadeo.
Este 28 de octubre, a diferencia del año pasado, las calles nuevamente lucieron llenas de comerciantes, y Humberto Zamora, es uno de ellos, ahí esperando a los clientes del día, dijo que esta temporada es considerada muy buena para el comercio de las alcancías y monos de yeso, pues las ventas llegan a superar el 100%, y es que todos buscan una figura de San Judas Tadeo que puedan tener en casa para acondicionarle un altar.
El año pasado tuvieron una fuerte crisis económica, al no poder salir a vender sus productos, ni al tempo de San Judas, ni al de ningún otro.
Contrario a aquella ocasión, este año la fiesta patronal se extenderá hasta que se retire el último fiel, lo cual históricamente ha sido después de las dos de la mañana, pues la gente llega con las danzas, con el mariachi, con banda, “hacen una verdadera fiesta”, concluyó el sacerdote del templo.
