La pandemia en 2020 paralizó al sector de la construcción por no ser actividad esencial, aunque en junio se reactivo un poco al reconsiderarse como esencial fue una situación aniquilante, pues muchas empresas dejaron de funcionar, expresó Miguel Ángel Reveles Pérez presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (Cmic) Durango.
Dijo que cuando el sector de la construcción está activo, se logra reunir cerca de 13 mil plazas de empleo en la entidad, pero para cerrar el año la plantilla en el sector se tuvo que hacer más pequeña llegando al orden de 3 mil trabajadores.
Explicó que antes de la pandemia ya se empezaba a presentar una problemática económica, pero la situación empeoró demasiando, y aunque señaló que se dio una crisis económica en general, considera que el sector de la construcción es de los más afectados.
Por el momento los afiliados a la Cmic siguen en espera de licitaciones de obra del crédito que obtuvo el Gobierno del Estado y que fue anunciado en el mes de julio del 2020, para inversión pública productiva, de las cual se han desprendido 70 licitaciones.
Los constructores han insistido en que es necesario que fluya ese crédito de manera más rápida para poder reactivar no solo al sector, sino a la economía del estado, y se levanten las fuentes de empleo.
Dijo que se depende mucho de la inversión de pública, pues la obra privada en Durango es poca, y no genera un desarrollo constante, la poca que ha llegado es de algunas inversiones, maquiladoras, y cadenas comerciales.