Cuando las clases presenciales en niveles básicos transcurren prácticamente de manera normal en territorio estatal no obstante el repunte de la pandemia, ahora el desafío latente de la autoridad educativa, es la regularización de los alumnos, en un reto que para nada es fácil luego de casi dos años fuera de la institución.
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Así lo subrayó el Secretario de Educación en Durango, Rubén Calderón Luján, quien al respecto explicó que hasta ahora, ante el crecimiento en el número de positivos a Covid-19, son casos aislados de inasistencia los que se presentan en algunas escuelas a causa de problemas de salud, por incidencias en los hogares de los niños y otras situaciones.
En tal sentido, dijo que los padres de familia no los envían, de ahí que se dé la insistencia. Sin embargo, es importante continuar con los protocolos sanitarios que deben iniciar desde los hogares para prevenir contagios de Covid-19, tanto en alumnos, como en la planta docente, subrayó el funcionario.
Los responsables de la prestación de los servicios de educación básica están preocupados por la regularización de los alumnos y buscan brechas para ver como se regularizará hasta donde cabe la regularización; “esto desde luego no es sencillo, después de un año ocho meses fuera de la institución educativa, sin embargo se establecen una serie de mecanismos y de innovaciones por parte de los profesores, quienes prácticamente ya están en esta dinámica”.
El presente ciclo escolar finaliza el próximo 8 de julio y aun con el receso de clases la Secretaría prepara el próximo, cuando los alumnos abandonen las aulas por el receso, la dependencia empieza a trabajar en la planeación”.