El 56.7 por ciento de las 96 mil 540 personas que se identifican como parte de la comunidad LGBTIQ+ en Durango, padece ansiedad; seguida por el 50 por ciento quien dijo tener depresión, lo que ha llevado a un 34.4 por ciento a tener pensamientos suicidas, lo anterior se dio a conocer en los resultados arrojados por la primera Encuesta Estatal LGBTIQ+ que realizó la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) en conjunto con asociaciones civiles.
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Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en Durango existen 96 mil 540 personas que se identifican como LGBTIQ+, esto representa apenas el 7.1 por ciento de la población total, sin embargo se cree que el porcentaje puede ser mayor pues se estima que puede llegar al 10 o el 15 por ciento, sin embargo muchos de ellos no revelan su orientación.
Con esto Durango se encuentra en el lugar número 23 con población de la diversidad sexual en el país.
La violencia familiar o escolar en contra de quienes forman parte de este sector son una constante pues la encuesta revela que el 23.9 por ciento de los entrevistaron dijeron haber tenido actos intimidatorios en el entorno escolar, mientras que en sus hogares este tipo de violencia llega al 13.7 por ciento.
Lo anterior nos lleva a un dato que en pleno siglo 21 pareciera extinto y sin embargo continúa presente, y es que en al menos al 21 por ciento de ellos les han sugerido u obligado a tomar terapia para corregir su orientación sexual o identidad de género.
“Las mal llamadas ‘Terapias de conversión’ o ECOSIG (Esfuerzos para Corregir la Orientación Sexual y la Identidad de Género) son prácticas consistentes en sesiones psicológicas, psiquiátricas, métodos o tratamientos que tienen por objeto: modificar, obstaculizar o menoscabar la expresión o identidad de género, así como la orientación sexual de la persona”, advierte la encuesta.
Estos incluyen “actos de tortura, tratos crueles, inhumanos y degradantes, que van desde toques eléctricos en genitales, baños con agua fría hasta rigurosas dietas y medicación con fármacos controlados”. Hasta el momento Durango no ha legislado al respecto, por lo que pidieron a los diputados locales hacer algo al respecto para evitar que este tipo de conductas continúen.
Y es que respecto al tema de salud mental, se informa que las ideas suicidas es tres veces mayor en las personas que forman parte de la comunidad LGBTIQ+, que en la población heterosexual, lo mismo el caso de intentos de suicidio que llegan hasta el 14.2%.