Parte de adaptarse a la nueva normalidad por la situación de pandemia del Covid-19, ha sido el uso indispensable de la tecnología, una medida para mantener lo más posible las actividades diarias, tal como ha sido el caso de la Iglesia para adaptarse al uso del internet y seguir con la evangelización de los fieles.
El padre Noé Soto, mencionó que es necesario adecuarse a la tecnología para expandir el mensaje de Dios, incluso antes de la pandemia ya empezaban con algunas transmisiones en vivo, ahora estas se programaron diariamente a fin de transmitir la eucaristía durante los cuatro meses que permanecieron las puertas cerradas.
Reconoció que esta es también una nueva normalidad para la Iglesia, parte de nuestros días y parte de la verdad humana.
También tuvieron que adquirir algunos equipos, y en el caso de las parroquias donde los padres son mayores de edad y no tenían mucho contacto con la tecnología y el internet, Dijo que siempre tiene el apoyo de los jóvenes o de las personas que acuden a las iglesias.
A nivel arquidiocesano de alguna manera todos se han apoyado, porque entre los sacerdotes o grupos de párrocos, están de acuerdo que el internet y las redes sociales siempre serán una buena alternativa de evangelización.
Recordó que precisamente en línea, se realizaron las cruzadas matrimoniales y cruzadas juveniles de este año, de las cuales no se ha hecho una evaluación general, pero están seguros de que llegaron a miles de familias.
Comentó que el fruto de las cruzadas se verá a largo plazo, porque se siembra la semilla, motivando a las familias y jóvenes con la palabra del bien.
