Es una contradicción que sea la propia autoridad municipal quien violente los reglamentos: el Gobierno Municipal se niega a retirar las “maxi-mamparas” publicitarias que ha instalado en el propio Centro Histórico, en la Plaza IV Centenario, en el Ex Cuartel Juárez, en plazas, jardines y cruceros importantes de la ciudad, mismos que incumplen con el Reglamento de Imagen Urbana y el Reglamento del Centro Histórico, denunció la regidora del Ayuntamiento, Minka Patricia Hernández Campuzano.
La edil capitalina recordó que ha realizado ya dos posicionamientos en el Cabildo pidiéndole al presidente municipal el retiro de estas maxi-mamparas que no cumplen con el tamaño permitido ni con los sitios en donde se colocan.
“No hay certeza de qué dependencia mandó instalar estas mamparas, son de la administración municipal y hay una gran omisión de la Dirección de Desarrollo Urbano al no retirarlas puesto que el Reglamento le atribuye el cumplimiento del mismo por lo que deberían haber sido retiradas”, expuso, tras dar a conocer a los medios de comunicación esta situación.
En este sentido exhortó a la Dirección de Desarrollo Urbano que retire estas mamparas con miras a la legalidad y el cumplimiento que el municipio debe de tener de sus propios reglamentos y a la seguridad y protección de los ciudadanos “ya que representan un riesgo con los vientos que se presentan en esta temporada, ha habido casos que se han caído y representa un alto riesgo para la ciudadanía”.
Anotó que “quisiéremos pensar que es por desconocimiento a los reglamentos, sin embargo al hacérselos notar en el mismo Cabildo ellos deberían de actuar de manera inmediata y no atienden el llamado de los regidores en base a los reglamentos”.
En este sentido señaló que ya no se puede hablar de un desconocimiento, sino de una omisión al reglamento y “aprovechar los tiempos que a costas de lo que sea quieren hacer publicidad”.
Finalmente Hernández Campuzano indicó que esta es una contradicción en que incurre el Gobierno Municipal y “es lamentable que sea la propia autoridad quien violente los reglamentos y la ley, deja en una situación laxa, es un abuso de autoridad en base a la discrecionalidad en la aplicación del reglamento”.