Edificios con 100 años en Canatlán

Inmuebles como el templo parroquial y la antigua estación del ferrocarril, fueron construidos en 1019

Marco A. Rodríguez

  · domingo 27 de octubre de 2019

CANATLÁN, Dgo. (OEM).- En el presente año, edificios representativos en la historia del municipio de Canatlán cumplen cien años, la torre y la parte frontal del templo parroquial de San Diego de Alcalá y el de la antigua estación del ferrocarril, actualmente muy descuidado y con poco uso.

Ambos inmuebles lucen la fecha de 1919 en sus frentes, marcando el año en que fueron terminados, recordando que en ambos casos ya existía un edificio anterior.

El templo parroquial está presente desde cuando se tuvo en el pueblo de Canatlán la presencia franciscana. En Historia de Durango, del historiador Ignacio Gallegos Caballero, se anota el nombre de frailes que estuvieron al frente de la Misión, instalada en Canatlán, que a principios del siglo XVIII se transformó en vicaría, entre ellos estuvieron Fray Juan de Argüelles (en el año de 1693), fray Pedro de Portillo (1694), fray Antonio de Lazcano (1697), fray Francisco de Guadiana (1699) fray Antonio de Lazcano (1700), fray Francisco de Cangas (1702), fray Antonio de Lazcano (1704), fray Francisco de Cangas (1705-1707).

En este periodo, San Antonio de Durango, en la capital del estado, se declaró convento y su vicaría anexa San Diego de Canatlán.

En el año de 1859, la Vicaría Franciscana fue elevada al rango de Parroquia Foránea, en un tiempo en que Durango vivía épocas políticas intensas, que se observan al paso de gobernadores como Juan José Subízar, Marcelino Murga, Miguel Cruz Aedo y José María Patoni.

En investigación realizada por quien escribe, en los Libro de Bautismos de la Parroquia de San Diego de Canatlán se encontró que el presbítero Ignacio Luis Nájera, era el párroco en el mes de agosto del año 1897, quien estuvo durante cinco años, hasta el día 22 de diciembre de 1897, cuando llegó para hacerse cargo de dicha responsabilidad el presbítero Jesús Loya.

De entonces a la fecha, por la parroquia han pasado, como responsables de la misma y pastores del pueblo católico de Canatlán los presbíteros Pedro Lugo (interino) en el año 1901, siendo relevado en el año 1902 por el padre San Luis Batis, quien estuvo como párroco durante veinte años, hasta 1922, siendo él quien realizó la reconstrucción del templo, tal y como actualmente está.

En lo que se refiere al bello edificio de la estación del ferrocarril, está el antecedente de que la construcción del ramal Durango-Tepehuanes del Ferrocarril Internacional Mexicano, como puntualmente lo marca prestigiado historiador Javier Guerrero en su libro “Las estaciones del ferrocarril de la ciudad de Durango”, inició en el último año del siglo XIX.

Anota también que, “el 3 de marzo (de 1900) llegó el primer tren de balastre a Canatlán, por lo que la fecha de inauguración se adelantó, incluso más de la planeada originalmente y se dispuso que para el 15 de marzo se pusiera en servicio de manera regular el tránsito de trenes mixtos, aunque el servicio público del tren mixto empezó a correr diariamente a partir del día 24, con escala en Casa Blanca, San Antonio, Cacaria y Canatlán”.

Dos edificios que tienen un siglo de historia, que bien merece ser recordado por la autoridad de gobierno municipal, tal y como se hizo con el centenario de Canatlán como municipio.