CANATLÁN, Dgo. (OEM).- La fruticultura aún es negocio en Canatlán; hace falta más apoyo gubernamental en infraestructura y también en investigación para el cultivo de la manzana, dice el reconocido fruticultor César Octavio Gallegos Gutiérrez.
Exitoso productor de la pomácea y también presidente de la Integradora Regional de Productores de Manzana de Canatlán, hace ver que la fruticultura sigue siendo negocio en la zona, muy buen negocio, nomás que mucha gente pierde el ánimo de seguir en la huerta o seguir replantando porque se encuentra descapitalizado, no hay muchos apoyos del gobierno.
Recordó que hay un proyecto que se bajó por medio de una sociedad que encabezan Max Villarreal y Arturo López Bueno. “Ellos tuvieron la fortuna de bajar un proyecto de cien mil árboles para la zona que van a plantar este año, pero no dejan de ser pocos los que reciben apoyos”, aseveró
Reiteró que se necesitan también apoyos en mallas antigranizo, motivación, para que la gente siga creyendo en la fruticultura, que sigue siendo un negocio.
Hace falta el contar con un investigador en el campo experimental del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) que se encuentra en el municipio, urge la investigación para que aterricen proyectos a favor de la producción de manzana.
Tenemos años sin investigación y claro que hace mucha falta para contar con información que permita atender la plantación de acuerdo a los requerimientos propios de la zona.
El gobierno nos tiene muy abandonados, se requiere reactivar la zona frutícola y para ello activar un proyecto que represente volver a recuperar la superficie con vocación frutícola, mencionando como de una superficie de más de diez, doce mil hectáreas que se llegó a tener hace años, en el municipio canatlense, actualmente no rebasa las cuatro mil.
Inclusive no se tiene un padrón confiable en cuanto al número aproximado de superficie de manzano en producción y cultivo de manzano en desarrollo; se dijo hace tiempo que el Comité Estatal de Sanidad Vegetal estatal levantaría un padrón de productores y con ello conocer la superficie dedicada a la producción de manzana.
Sin embargo hoy en día se desconoce con precisión el número de hectáreas dedicadas a la producción frutícola.
El desmantelamiento de las huertas de manzano se dio por algunos factores, entre ellos la de árboles que se “aviejaron”, fueron afectados por enfermedades y en otros casos, por el interés del propietario de la huerta en cambiar el destino de la producción, transformando el huerto de manzana en parcela agrícola, para la producción de granos y forraje, observándose un cambio en el panorama general y en donde por años y años fueron plantaciones frutícolas ahora son espacios para la producción agrícola, invernadero incluido en algunas de ellas.