Una vez más, como cada cuatro años, nuestra Máxima Casa de Estudios vivirá una jornada muy importante para elegir en unos cuantos días al nuevo comité del sindicato de la SPAUJED, el cual agrupa al personal académico de la UJED. En esta ocasión, parece que todo apunta para que los maestros de la universidad tengan la alternativa de votar por la transparencia, o por la opacidad que desde hace ocho años ha padecido la UJED con la corriente identificada con el actual secretario general, Jesús Soto. Si bien es cierto que su esposa tiene derechos para ser candidata, lo que no ve con buenos ojos la sociedad es que se intenta una especie de nepotismo electoral en esta elección.
Se comenta que en los recientes 8 años, el actual sindicato de la SPAUJED no ha sido nada transparente con sus agremiados con los recursos que aportan. Hay, por ejemplo, casos que los catedráticos ponen en duda por el manejo de los préstamos hipotecarios, o para comprar un carro. Sería bueno comentar que la elección del nuevo comité del SPAUJED tendrá que llevarse a cabo de acuerdo con la nueva reforma laboral, donde se establece, entre otras cosas, la garantía del voto libre y secreto de los maestros a la hora de emitir su voto.
Podríamos decir que por primera vez en la historia de la Universidad Juárez del Estado de Durango habrá piso parejo, y serán los maestros quienes elijan a sus representantes.
De un lado, podrá haber más de lo mismo o continuismo con la candidata Sagrario Salas Name. Ya mencionamos que la candidata tiene sus derechos legítimos, los cuales no están en duda, pero en el pecado del nepotismo podría llevar la penitencia. El caso del otro candidato, Erik Hernández Cousain, cuyo eje principal de discurso de campaña es la transparencia, en obvia referencia a la opacidad en la rendición de cuentas por parte del actual secretario general del Sindicato de Personal Académico de la UJED, Jesús Soto.
El candidato Erik Hernández no es improvisado en temas sindicales, para ser candidato renunció a su cartera en el actual comité. Y como se comenta que en ocho años se ha privilegiado la opacidad en el manejo de los recursos de los maestros, y si el actual comité propone con su candidata que todo cambie para que todo siga igual, los maestros deberán pensar y razonar su voto.
La bandera de Sagrario Salas Name es decirle a los 2,000 maestros que votarán que van a desaparecer la jubilación dinámica, seguro de vida, el tema del ISSSTE, préstamos hipotecarios, entre otras prestaciones.
Todos sabemos que las prestaciones plasmadas en el contrato colectivo de trabajo con la parte patronal de la UJED, son imposibles de desaparecer. La rectoría no se haría el harakiri. También es cierto que estas prestaciones, por cumplirlas la UJED ha tenido muchos problemas financieros. Como dicen en el baseball: “Por ahí no es”.
A los académicos ya no se les puede engañar ni asustarlos con el petate del muerto.
Los 2,000 maestros votarán, sin duda, por lo que más le convenga al sindicato y a la universidad. Tienen dos propuestas para votar: opacidad o transparencia, y quienes representan esas dos posturas.
