A pesar de que aún existen prejuicios en torno a la condición de las personas con Síndrome de Down, lo cierto es que en el transcurso del tiempo han logrado avanzar en incorporarse cada vez más a una serie de actividades que les permiten un crecimiento pleno, señaló la terapista Brenda Esparza López, durante un Conversatorio sobre este tema que organizó el Sistema Integral para la Protección de Niños, Niñas y Adolescentes, (SIPINNA).
Al participar en esta actividad virtual en la que interactuó con otros especialistas, la maestra en Terapia Familiar destacó los logros que han conseguido quienes nacen con una condición diferente.
Explicó que aún se tiene en algunos círculos familiares la falsa creencia de que es solamente la madre quien debe encargarse del cuidado y la crianza de estos chicos, pues incluso hay madres que asumen una condición de culpabilidad, este hecho atribuible solamente a cuestiones de carácter médico y genético.
El Síndrome de Down es una alteración genética que consiste en que a persona tiene un cromosoma extra, por lo que en lugar de 46 cromosomas, tienen 47.
Destacó que aún pesan muchos tabúes o ideas equivocadas en torno a ellos. En ocasiones son condicionados o limitados debido a su padecimiento congénito, pero también la atención familiar se vuelca solo hacia la persona con Síndrome de Down y no debe ser así, además existe la falsa creencia que serán "bebés eternos".
Por lo que quien la presenta, tiene capacidades de crecer e incorporarse en varios ámbitos, incluso su esperanza de vida y desarrollo social han avanzado, al grado que cada vez ocupan mayores espacios, “debe dejársele de ver como a alguien que está incapacitado”, señaló la especialista.
La inclusión para ellos ha avanzado en muchos ámbitos, pueden verse trabajando en súper mercados, son artistas, pintores, bailarines, escritores; es decir, que la condición genética con la que nacieron no debe ser un obstáculo para que salgan adelante en un entorno que les ha proporcionado diversas herramientas para lograr su igualdad, dijo Brenda Esparza López.