Un 10% de pérdida en las ganancias de las empresas mineras se registran anualmente debido al robo hormiga, ataque directo a concentrados de mineral e incluso el hurto de nómina, actos que se registran principalmente en las exploraciones alejadas de la población.
Jaime Gutiérrez Núñez, director general de Minas de Bacís, explicó que en las explotaciones mineras alejadas, tanto el crimen organizado como gavillas se aprovechan de la lejanía y cometen robos de diferente índole, desde mineral, refacciones e incluso la nómina a pagar a trabajadores.
Resaltó que el robo hormiga es cotidiano, lo cual a la par con los otros atracos merma en un 10% la productividad de las diversas empresas mineras, añadió que la fecha no se tiene registros de ataque directo para robar mineral o barras, tal como ocurrió el año pasado, sin embargo cada robo a mineral o barras impacta negativamente a la empresa, ya que al salir dicho producto tiene costos de exploración y proceso, los cuales simplemente desaparecen.
Gutiérrez Núñez indicó que un impuesto más que se les aplica a los minero y del cual no se habla es el de seguridad, ya que las empresas tiene que pagar decenas de personal en dicho rubro para estar a la expectativa de que lo que suceda en las instalaciones o producción, “lo cual es un impuesto adicional que normalmente no se considera”.
El minero fue contundente al comentar que el robo y el pago de diversos impuestos generan menos utilidades a las empresas, hecho que se refleja en la generación de empleos.
