El incremento en los precios de los productos de la canasta básica es alarmante y así lo demuestran los números y los monederos de las amas de casa que salen a realizar sus compras con la esperanza de llevar lo suficiente para la despensa de la semana, aunque la realidad les dice que con una inflación del 7%, estos han llegado a costos de hasta el 70% por arriba del precio de hace tres años.
De acuerdo con una tabla comparativa entre los precios que se ofertaban en octubre de 2018 y noviembre de 2021 según la Profeco, se observan incrementos preocupantes en la mayoría de las mercancías, un ejemplo de ello es el aceite cuya botella de un litro tenía un precio de lista de 26.20 pesos, mientras que ahora se consigue en 42 pesos, es decir, un aumento del 60%.
Y los productos cárnicos cada vez se vuelven más costosos para las familias mexicanas, pues un kilogramo de carne de cerdo pasó de 87 pesos, a un precio de lista de 123 pesos por kilo; mientras que el pollo entero subió más del 60% al pasar 39 a 65 pesos.
“Ya no alcanza ni para comprar lo de siempre”: madres de familia
“Ya no me alcanza para comprar lo de siempre”, asegura Ángeles Martínez, un ama de casa que ha visto como en los últimos años la cantidad de despensa que solía comprar ya no es la misma, “antes me alcanzaba para traer galletas o yogurt, ahora busco la marca de leche más económica porque definitivamente las marcas más comerciales están por los cielos”, y esto es cierto, pues de 16 pesos que costaba un litro de leche en el 2018, ahora tiene un precio de 24 pesos.
Aunado a la percepción de las madres de familia, empresarios locales advierten que la reactivación económica del último bimestre del presente año, no será suficiente para enfrentar la cuesta de enero ante una histórica inflación del 7% que ha provocado una crisis en todos los sectores productivos ante un pésimo manejo de la economía del país por parte del Gobierno federal.
Declaró que dicha inflación provoca fuertes estragos en la economía de las familias duranguenses quienes día a día adquieren los productos de la canasta básica a precios muy elevados, mientras que para los comerciantes la utilidad se redujo.
Esto ocasiona un freno a la economía de los mexicanos que le apostaron al desarrollo del país, y ahora no hay circulante, por ello durante el mes de diciembre se espera un incremento de circulante, sin embargo, no será suficiente para amortiguar la cuesta de enero y febrero, meses en los que la inflación pudiera incrementarse.
Lamentó el mal manejo de la economía nacional por parte del Gobierno federal, que de no recomponer el manejo, la situación se tornará más difícil en los próximos meses del 2022, finalizó Holguín Herrera.