Evidentemente que la Facultad de Ciencias Exactas, igual que todas las unidades académicas que conforman la Universidad Juárez del Estado de Durango, atravesó por una situación difícil para concluir el semestre “A” 2020, ya que la pandemia derivada del Covid-19 llegó para cambiar la forma de trabajar en el mundo, frenó el proceso de crecimiento, así como la manera de entablar relaciones con la sociedad, sin embargo, rápidamente logró incorporarse a la nueva normalidad a través de las actividades académicas que ahí se desarrollan.
El director Armando Mata Romero destacó que afortunadamente la Universidad tiene los elementos propios para trabajar con los alumnos de manera virtual, y así se hizo con mucho éxito y una excelente aceptación de los estudiantes.
Un aspecto para destacar en este proceso -dijo-, es que se pudieron rescatar a algunos estudiantes que tenían la intención de desertar, argumentando la dificultad del dominio de las herramientas tecnológicas, aunado a la depresión en la que cayeron algunos chicos precisamente por las mismas causas.
Subrayó que, por otra parte, durante las semanas que se tomó la medida de que las clases de dieran en forma remota, los maestros también hicieron un buen trabajo, “…una excelente labor para terminar bien en cada uno de los grupos…”, indicó.
Mata Romero destacó que la Facultad tiene dos programas de posgrado. Por un lado, ya se llevó a cabo el curso propedéutico para el ingreso a la maestría en Matemática Educativa, y agregó que en esta ocasión se abrió un grupo en el campus Gómez Palacio.
Está también la maestría en Estadística y se ha mostrado mucho interés por parte de los jóvenes para cursar la licenciatura en Matemáticas Aplicadas.
El directivo universitario dijo que es en los programas de posgrado donde menos se han tenido problemas con respecto a la deserción de los alumnos, ya que en ese nivel de estudios se tiene un amplio recorrido en el tema de trabajar a distancia.