Un partido de traidores
Como precedente, 4 policías corruptos fueron despedidos, aunque a decir verdad, si van a despedir a todos los corruptos, nos quedamos sin cuicos.
Lo malo de esto, o lo bueno, según lo vea, es que estos policías ya no podrán volver a ejercer como tal, por lo que tendrán que dedicarse a lo que en realidad son: Maleantes.
Se le están complicando las cosas al güero de Amacuable.
Nos dicen que por falta de recursos, Pensiones sólo le presta a los sindicalizados.
Por falta de recursos, no se pagan los seguros de los profesores.
No se aporta al fondo de la vivienda y lo más grueso, no se les pagan los quinquenios.
Esto puede tronar, porque esto es consecuencia del drástico recorte del presupuesto de la aportación federal, producto de ese rencor que el presidente tiene contra los durangueños.
Los diputados, menos los de Morena, que sirven al presidente y no a los electores, están luchando para apoyar la causa del gobernador y ojalá lo logren, porque el pueblo de Durango no tiene la culpa de los golpes de hígado del presidente.
Morena va a escoger candidatos a gobernador, se supone que es un partido de izquierda, aunque en realidad es un partido de traidores.
Entre los que se mencionan como posibles, dos se apuntan, pero para presidentes municipales, Iván Ramírez e Ignacio Aguado, pero para gobernador nadie es de izquierda, salvo el petista Gonzalo Yáñez, que ha sido fiel siempre a su partido, el PT.
Vamos a ver para qué sirve esa mentada Policía Cibernética.
Esa entelequia, que es la consulta para Revocación de Mandato, que va a costar miles de millones innecesarios, porque sólo servirán para alimentar el ego del presidente López Obrador.
A los regidores Daniela Soto y David Payán, los únicos que tiene el PRI en el Cabildo, no les va tal mal, entre ambos se llevan buen recurso mensual, disque para gasto de gestoría.
Ya quedan sólo unos cuantos en el plantón de frente al Sindicato de Trabajadores Municipales, al parecer, ya resignados a que Lichita no volverá a la Secretaría General y mucho saldrá ganando si no la meten al bote.