Jorge Humberto Ochoa, gerente de Librería Ochoa, manifestó que en el 2020 las ventas de libros a nivel nacional cayeron hasta un 70 por ciento, lo que llevó al sector a una complicada situación económica, además destacó que Durango es de los más afectados, pues es uno de los estados que menos lectores tiene.
En la capital hay siete librerías establecidas, y dos de ellas podrían estar en peligro de cerrar, porque según afirmó el problema económico es general, como lo que se pudo apreciar con Sanborns, una librería que era competencia directa y sana, pero el fin de semana pasado anunció su cierre definitivo.
Reiteró que las ventas han sido muy bajas, las que se hacen en el mostrador disminuyeron hasta en un 70 por ciento, mientras que la venta de libros a instituciones bajó un 50 por ciento, por lo que esperan que este año puedan recuperarse.
Afortunadamente la Librería Ochoa no depende solo de las ventas directas al cliente, pues de ser así dijo, el negocio ya hubiera decaído. Actualmente los mantiene activos las ventas de libros a escuelas desde preescolar, hasta profesional y literatura general en otras entidades como Chihuahua, Zacatecas, Coahuila y Aguascalientes; actividad que en la que llevan activos desde hace 35 años.
Manifestó que uno de los principales problemas que se han detectado en la entidad, además de la baja lectura, es que las rentas son demasiado caras, incluso algunos precios más elevados que en Monterrey, entonces los empresarios se enfrentan a esa problemática de pago a pesar de que no generan ventas o como en la pandemia que tuvieron cerrados los negocios por varios meses.
Al explorar otras opciones de venta comenzaron a hacer entregas de libros a domicilio, los clientes pedían su libro y se lo enviaban, así como las ventas a través de internet, algo que les ayudó a generar clientes durante la pandemia.