GÓMEZ PALACIO, Dgo. (OEM).- Los constantes incrementos en forma exagerada a los insumos como el maíz, gas, energía eléctrica, entre otros, obliga a que los industriales de la masa y la tortilla aumenten el costo del kilo de tortilla que incluso puede llegar a los 30 pesos.

Así lo declaró Fernando Zúñiga Hernández, presidente de la Unión de Productores de la Masa y la Tortilla en Gómez Palacio, a la cual están adheridas 67 tortillerías, quienes tienen costos del kilogramo de tortilla entre los 22 a 26 pesos.

Expuso que llegar a los 30 pesos es un poco difícil, incluso hasta pensé que sería muy “descabellado”, pero viendo cómo van los aumentos a los insumos en forma exagerada, no descarto que se pueda llegar en poco tiempo a esa cifra.

Comentó que el maíz ha tenido hasta un 25% de aumento en lo que va del presente año, mientras que el gas LP (licuado del petróleo), cada semana tiene un incremento, aunque son unos centavitos, pero poco a poco se resiente el alza, mientras que la energía eléctrica sigue alta.

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Dejó en claro que los tortilleros adheridos a esta unión, manejan harina de calidad, de ahí que el costo del kilo de tortillas va desde los 22 a 26 pesos, debido a que el producto es de buena calidad, la tortilla es suave y dura más tiempo, aunque hay quienes buscan la calidad y otros buscan la economía y compran la tortilla con la competencia desleal que da a bajo costo.

Zúñiga Hernández explicó que el aumento que pueda darse en el precio de la tortilla no es que se determine que todos los industriales la apliquen, pues hay quienes valoran con base a sus costos de producción, pues hay quienes trabajan en pausas y detienen máquinas y a ellos son los que se les dispara más sus gastos por el precio del gas, es por ello que hay variación en los precios de cada tortillería.

“No hay quien determine o pueda controlar un precio determinado al kilo de tortilla, hace mucho que se dejó libre y ahora es con base a la oferta y la demanda”.

Finalmente, Zúñiga Hernández comentó que las tortillerías son prácticamente familiares, ya no generan empleos para más personas y uno de los problemas que enfrentamos luego de los altos costos en los insumos, es la comercialización, de ahí que ya no sólo se vende en el mostrador, sino que se busca salir llevar el producto hasta los hogares.