El Senado se convirtió en un verdadero campo de batalla para elegir su mayoría durante las elecciones generales de Estados Unidos. Hasta los primeros minutos de hoy, pero aún con resultados preliminares, los republicanos mostraban cierta ventaja hasta el cierre de esta edición a las 00:30 horas.
Los demócratas necesitaban desbancar a cuatro republicanos si querían hacerse con la mayoría, aunque si las tendencias se volcaban a favor de Joe Biden como sólo se necesitarían tres escaños nuevos, ya que en caso de que haya un equilibrio 50-50 el vicepresidente ejercería un voto decisivo.
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Los republicanos tienen actualmente 53 de los 100 escaños del Senado y en la jornada de ayer se pusieron en juego 35 puestos en la Cámara Alta.
Pasada la media noche prevalecía , se mostraba un cierre dramático en las previsiones de las agencias y medios locales, al colocar a los republicanos con una ventaja de 46 senadores, contra 45 de los demócratas, quedando 9 puestos al aire.
Para la Cámara de Representantes la situación fue aún más compleja, ya que se eligieron los 435 lugares de los legisladores con una tendencia de 153 republicanos contra 141 demócratas y quedando en suspenso otros 141 sitios. Actualmente la mayoría pertenece al partido azul con 233 puestos, mientras que su rival cuenta con 198, más 1 independiente y tres puestos vacantes.
El control de ambas cámaras es primordial para el funcionamiento del gobierno electo, ya que tanto el Senado como el Congreso deben deliberar las propuestas de ley del Presidente, si un órgano es comandado por la oposición del partido gobernante se enfrentará a una serie de trabas para frenar los procesos propuestos por el Ejecutivo.
