Los Reyes de Durango lo volvieron a hacer, en el segundo partido consecutivo en casa, derrotaron 82-78 a los Piratas de Mazatlán, en acciones correspondientes al Circuito de Baloncesto del Pacífico (Cibapac).

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Fue un cierre cardiaco en el Auditorio del Pueblo, en donde el trabajo técnico fue lo que hizo valer la condición de local.

Ambos equipos saltaron a la duela dando el todo por el todo, querían el triunfo a como diera lugar, en el primer periodo los Reyes se llevaron la victoria parcial de 18-16, solo dos puntos de diferencia.

En el segundo periodo, el conjunto duranguense mostró algunos ajustes en la defensiva, y en la ofensiva las jugadas elaboradas y el entendimiento fue lo que hicieron valer la pena y mantenerse al tu por tu, se fueron al descanso con marcador de 42-40 a su favor.

El descanso se utilizó para que ambas escuadras tuvieran una plática y replantear las jugadas, puesto que las acciones fueron tan parejas que el partido podía para cualquiera de los dos bandos.

En el tercer periodo se comenzó con la mentalidad de hacer canastas por parte del conjunto local y eso se notó en el marcador, con un 62-56 y los Piratas ya empezaban a preocuparse.

Para el último cuarto, el extranjero Anthony Jones se hizo notar en la duela, daba mucha confianza a su equipo lo que les daba más control de balón para seguir con la delantera.

Las emociones e intensidad estuvieron presentes, los del Puerto del Pacífico, no bajaron la cabeza en el ataque y se acercaron en el marcador con solo diferencia de dos a tres puntos.

Reyes supo manejar de muy buena manera esta presión y a pesar de batallar, logró mantener la ventaja para terminar con el triunfo en números de 82 a 78.