CANATLÁN, DGO. ( OEM).- De nueva cuenta, como cada 12 de diciembre, en el municipio de Canatlán, Durango, se vistió de guadalupano, en el marco festivo religioso del Día de la Virgen de Guadalupe.
Desde la víspera, las carreteras Panamericana y la Francisco Zarco que atraviesan el municipio, fueron marco permanente de recorridos de contingentes portando el llamado fuego o antorcha guadalupana, provenientes del Santuario de Guadalupe en la ciudad de Durango y con rumbo al respectivo destino en las regiones norte, centro norte y noroeste del estado.
En Canatlán el ulular de las sirenas y el ruido seco del cohete al estallar anunciaban desde la noche del sábado la llegada o el paso de contingentes portando la antorcha.
El representativo de Nuevo Ideal es el más numeroso de los que atraviesan ciudad de las manzanas, toda una tradición desde los tiempos en que Trini Hernández (+), quien coordinaba los recorridos al hacer escala en el templo parroquial de Canatlán, como hasta el día de hoy.
Las devociones y altares guadalupanos presentes en todas las colonias y barrios, entre ellas la de la familia Rodríguez, en la colonia Roma, a escasos metros del hogar de la familia Valdez, que por tantos años mantuvo la veneración, homenaje y Rosario a la Virgen de Guadalupe, incluyendo los esperados danzantes o matachines.
La carrera guadalupana de los jóvenes, los veteranos, la femenil, la Colonia Ejidal y el fraccionamiento Los Manzanos, además de las que cada localidad rural organiza, son esperadas por la población, por familiares y amigos de los corredores, que arreglo floral en mano los esperan en la capilla o templo donde culminan el recorridos, escuchando la celebración religiosa.