Durante siglos la salud y la enfermedad han sido sucesos que además de promover su estudio, han maravillado a la humanidad. En la actualidad no se concibe el progreso y el bienestar de una pequeña comunidad o una gran nación sin un sistema de salud que satisfaga las necesidades de las y los ciudadanos.
El sistema de salud en nuestro país estuvo abandonado por los gobiernos del PRI y el PAN, no les importó invertir en él, por eso ahora tenemos un programa para reconstruir este sistema y mejorar la atención de este aspecto fundamental para nuestra sociedad. El inicio de este cambio ya se ha dado en el estado de Nayarit y este año se sumarán 14 estados más en el que se incluye Durango.
En este programa participan el Instituto Mexicano del Seguro Social y el Instituto Nacional de Salud para el Bienestar -el que destina los recursos para su aplicación-, mediante lo cual se rehabilita la infraestructura para la atención de la salud de las y los mexicanos, para contar con mejores servicios y el IMSS aporta el modelo de atención.
Este modelo de Salud Bienestar ya se puso en marcha en Nayarit (desde hace 6 meses cuentan con un gobernador comprometido con su pueblo), y ya se han rehabilitado 100 centros de salud y están en marcha los trabajos de 114 centros más.
Mediante un esquema de mezcla de recursos provenientes de recursos federales se brindarán mejores servicios a los más de 60 millones de mexicanos que no cuentan con seguridad social, además a través de mesas de trabajo se ha perfeccionado la compra de medicamentos a fin de tener un mejor abasto y con ello tratamientos más oportunos para las enfermedades que afectan a la población.
Como presidenta de la Comisión de Salud del Senado de la República, me siento orgullosa del rescate que se hace de nuestro sistema de salud, del interés que se pone por parte de las autoridades sanitarias y de la unidad en criterios de las instituciones mexicanas.
Convencida por formación de que la salud es un derecho humano y no un privilegio, reitero mi compromiso de pugnar para que se incremente el presupuesto que se destina al sistema de salud nacional y esto repercuta en un mejor servicio que incluya la prevención a través de la investigación de todas las enfermedades que padecemos.
