La relación de Eréndira Ibarra con la saga de Matrix tiene su historia. La actriz mexicana que forma parte de la cuarta entrega, Matrix resurrections, es más que una fan de la trama de ciencia ficción que en 1999 dieron a conocer las hermanas Lana y Lilly Wachowski.
“A mí la primera película de Matrix me cambió la vida, la segunda me dieron ganas de entender mejor el amor y la tercera me partió el corazón porque sentí que me soltaron la mano en un momento muy importante de mi historia personal”, explicó la actriz quien empezó a admirar la saga cuando tenía 14 años.
Para Ibarra, que con esta oportunidad empieza en firme una carrera en Hollywood, la cuarta entrega de la historia “me vuelve a agarrar la mano en un momento tan difícil para la humanidad, en un momento tan complejo para la industria, para todas las personas, nos vuelven a decir que nada es lo que realmente parece y nos vuelven a decir que tenemos el poder de definir lo que realmente importa”.
Hace 22 años, Matrix no sólo revolucionó el género de la ciencia ficción, su propuesta en las escenas de acción, especialmente las coreografías, y sus efectos especiales marcaron la diferencia en la forma de hacer cine.
Por eso, Matrix resurrections es uno de los estrenos más esperados del año, luego de que debido a la pandemia por Covid-19 la industria cinematográfica se puso en pausa y retrasó su salida.
Con un guion de Lana Wacho-wski, David Mitchell y Aleksander Hemon, basado en los personajes creados por las hermanas Wachowski, la cinta volvió a reunir en un set a Keanu Reeves y Carrie-Anne Moss, lo que se convirtió para Eréndira Ibarra en un sueño.
“Soy muy, muy fan de la saga. Cuando yo me enteré en Sense8 que iba a trabajar con Lana Wachowski y con David Mitchell, fue uno de los momentos más extraordinarios de mi carrera porque me han definido como persona, como mujer y como activista. Entonces me siento muy muy comprometida con la saga y además, parte de Matrix es mi vida también.
Hasta el momento no se ha revelado cuál es la trama de Matrix resurrections, pero las escenas de acción serán parte medular de la película, por lo que Eréndira Ibarra tuvo que hacer un trabajo previo de acondicionamiento.
“Hice mucha preparación física, mucha exigencia física, mucha más de la que había tenido. Antes había hecho entrenamiento de armas y artes marciales, mi esposo es cinta negra de jiu jitsu brasileño, por lo que he hecho mucho entrenamiento de artes marciales, pero nada te prepara para la acción en vivo”, explicó la mexicana.
“El kung fu es un mundo extraordinario, loco, el mundo de los stuns es algo que no había tenido oportunidad de conocer a tal profundidad y realmente mis respetos… Me duele todo todavía un año después de filmar, pero creo que va a valer la pena”.
Participar en Matrix significa para la actriz una experiencia extraordinaria. “Siento que quedan pocas palabras para describir realmente el impacto de tener una relación tan cercana como la que tengo (con Lana Wachowski)… tener la oportunidad de estar en proyectos como Sense8 y ahora Matrix“.
“Lana reafirma mi lucha, mis ganas por luchar por una industria diferente, por contar historias diferentes, por transformar a través del arte, es muy emocionante. Y me encanta tener la oportunidad de que se me considere parte de su familia y que podamos seguir creando juntas en un proyecto que a mí me cambió la vida”.
Después de estar un año alejada de su familia, este 2021 la actriz lo dedicó a sacar adelante sus proyectos como productora. Está desarrollando una serie con su hermana Natasha Ibarra, con su socia Bárbara Arredondo y con la escritora Brenda Lozano.
“Mi idea es contar historias diferentes, inclusivas, pero más allá de un discurso de dientes para afuera o del lente para acá, es muy fácil y muy común que veamos contenido ahorita de puras chavitas y piensas que la serie es feminista, pero luego te metes al set y ves puros vatos, aquí lo que realmente quiero hacer es abrir espacios tanto frente de cámara, como detrás de cámara”.