Eleva el Congreso del Estado de Durango a rango Constitucional el Derecho Humano a vivir en un ambiente libre de corrupción, para así seguir impulsando la cultura de la legalidad, donde la participación de la sociedad es importante, así lo manifestó el diputado local del PRI, Enrique Benítez Ojeda.
Afirmó “la corrupción es un problema para la democracia, porque supone la apropiación del poder público, lo cual conlleva el desvió de recursos públicos y el uso de relaciones ilegales para ganar licitaciones que tienen el objetivo generar bienes u ofrecer servicios públicos”.
El diputado reiteró que se debe romper el paradigma de la corrupción y acabar con la impunidad, “daña los derechos humanos, genera muertes, pobreza, desigualdad, inequidad y abre brechas sociales y económicas”, al razonar su voto a favor del dictamen que elaboró la Comisión de Puntos Constitucionales.
Es importante que se establezca la calidad de derecho humano a un ambiente libre de corrupción en Durango, y el Estado se obliga a encaminar esfuerzos legislativos y administrativos para contrarrestar este mal, “el combate a la corrupción es una demanda ciudadana y nuestro objetivo como legisladores deberá ser el consolidar la confianza de la sociedad en la honestidad de sus gobiernos”.
Finalmente argumentó “ningún Estado puede estar satisfecho de cumplir los principios de justicia y equidad que dan sustento al pacto social, si no se caracteriza por su ética e integridad”, ahora puede ser garante a través de la participación ciudadana como el Consejo de Participación Ciudadana del Sistema Local Anticorrupción, porque en una entidad libre de corrupción se genera confianza.