La zona de las quebradas atraviesa una situación económica complicada que ha generado que cerca de 300 familias hayan migrado a la capital de Durango o a Sinaloa, señaló el presidente municipal de Otáez, Héctor Herrera.
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Indicó que la vocación del municipio es minera y forestal, sin embargo en los últimos dos años la escasez económica que presenta la población ha sido visible.
Subrayó que la mismas situación atraviesan municipios vecinos como San Dimas y Topia. Reconoció que los programas federales han sido de ayuda para mantener a las comunidades, pues al recibir el recuso de adultos mayores, jóvenes construyendo el futuro y sembrando vidas no han migrado.
El edil municipal también se refirió a la sequía que atraviesa la localidad, dijo que los manantiales tienen poca agua, ante ello se han coordinado con la Comisión de Aguas del Estado de Durango (CAED) a fin de administrar agua por diversos medios, pues el acceso a muchas comunidades es complicado y sólo mediante vehículos 4 por 4 se puede llevar el vital líquido.
Dicha sequía se ha reflejado en incendios, situación que ha sido atacada por el Ejército Mexicano, la Comisión Nacional Forestal (Conafor), estado y municipio.
Añadió que las brigadas que atacan el fuego han funcionado con recurso federal y el municipio apoya a los combatientes con víveres y gasolina para el traslado.
