La mañana del sábado fue encontrado muerto un interno del Centro de Reinserción Social (Cereso) número 1 de esta capital, sin que hasta el cierre de esta edición las autoridades informaran la causa de muerte o el nombre del interno.
Según trascendió, sin que fuera confirmado por las autoridades de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), de la Fiscalía General del Estado (FGE) o del Instituto de Salud Mental del Estado de Durango (ISMED), se trató de un suicidio.
La persona se llamaba Jesús Salvador y se encontraba recluido desde el pasado 20 de agosto, cuando los agentes de la Policía Investigadora de Delitos (PID) lo detuvieron por haber asesinado a su hermano y su padre en la colonia Juan Lira Bracho, ubicada al sur de la ciudad.
Desde agosto del año pasado, El Sol de Durango le informó que Salvador, de 47 años de edad se encontraba el 20 de agosto en su casa y comenzó a discutir con su hermano Samuel Santos.
Tras la discusión tomó un arma blanca con la cual le causó múltiples heridas hasta matarlo y horas más tarde llegó al lugar Salvador, padre de ambos, a quien también asesinó.
Durante la madrugada del 21 de agosto, Salvador envolvió los cadáveres en hule negro y los subió a una camioneta Silverado, color beige, propiedad de Samuel, y los arrojó en el paraje conocido como "Las Ventanas", a la altura del kilómetro 29 de la carretera a La Flor, donde fueron localizados el 26 de agosto.
Cabe señalar que los familiares de Samuel Santos y Salvador interpusieron la denuncia de desaparición el día 22 de agosto, y al comenzar las investigaciones concluyeron en que la persona que amaneció muerta el sábado en el interior del Cereso número 1 había sido el homicida.