/ lunes 1 de abril de 2024

Acontecer Político

“Inicio de la guerra sucia: 31 días de campaña”



A 31 días de campaña electoral y del primer tercio de proselitismos de las y los candidatos al Senado de la República y de las diputaciones federales, se visualiza que el panorama político se va empañar por el inicio de la guerra sucia contra quienes en este momento han tenido un mayor acercamiento y contacto directo con los duranguenses.

No podemos dejar de lado, que tanto las y los candidatos de la alianza Fuerza y Corazón por México, Gina Campuzano, Gaby Hernández López, Paty Jiménez, Alejandra Terrones, Cristian Mijares y Sonia Flores; son hasta el momento los que más han recorrido las calles y regiones de Durango.

Sin embargo, lamentablemente, la guerra sucia parece destinada a intensificarse en el segundo tercio de la contienda. ¿El objetivo? Debilitar las fortalezas de aquello aspirantes con mayores posibilidades de triunfo en las urnas; la constante será la violencia política de género, ya que la mayoría de las candidaturas son encabezadas por mujeres.

Sin embargo, es crucial que tanto los contendientes como la ciudadanía mantengan su enfoque en las propuestas políticas. En medio de esta batalla de descalificaciones y estrategias cuestionables, es fácil perder de vista lo que realmente importa: las ideas y los proyectos que pueden impactar positivamente en la vida de los ciudadanos.

Es imperativo que la ciudadanía no se desmotive ante estas tácticas negativas y que provocan abstencionismo. En lugar de ceder al desaliento, debemos recordar nuestra responsabilidad como votantes de elegir a los mejores perfiles para representarnos. No nos dejemos influenciar por la manipulación en las redes sociales, recordando siempre que estas plataformas no otorgan votos directamente.

A medida que avanza la campaña, los candidatos deben mantener un debate constructivo, basado en ideas y propuestas, en lugar de sucumbir a la tentación de la desinformación y el ataque personal. Solo así podremos asegurar que las decisiones tomadas en las urnas reflejen verdaderamente la voluntad y los intereses de la ciudadanía.

Recordemos el caso de Gina Campuzano en 2021, cuando como candidata a la diputación federal fue víctima de ataques de violencia de género a través de la utilización de un perfil falso en redes sociales donde se utilizó su fotografía y nombre para vender un sillón del amor, situación que dañado su imagen; pero a la vez le permitió estar presente de manera mediática, por lo que más que perjudicarla se vio beneficiada por la estrategia fallida de sus adversarios políticos.

Sin embargo, este tipo de prácticas y descalificaciones serán el pan de cada día en el proceso electoral que estamos viviendo, donde se atacará, señalará o se minimizan las fortalezas de los aspirantes que tienen más posibilidades de ganar la elección el próximo 02 de junio.

En este sentido, todos los aspirantes a las senadurías, diputaciones locales y federales, deben enfocar sus esfuerzos en abordar temas sociales que verdaderamente interesan a la ciudadanía, ya que estamos cansados de escuchar las descalificaciones que muchos actores políticos utilizan como arma electoral.

Como ciudadanos, todos deseamos que no existan campañas de desprestigio entre los contendientes, pero también sabemos que es algo complicado; si embargo, sería lo más sano y positivo, para poder elegir a los mejores perfiles y las mejores propuestas legislativas.

Ojalá los spot y mensajes políticos que empezarán a incrementarse a partir del mes de abril a través de los diversos medios de comunicación y redes sociales, permitan a los ciudadanos tomar su mejor decisión y no solo generen dudas para tener unos dignos representantes en al Senado de la República y en las cámaras de diputados federales y locales.

No olvidemos que ni la mercadotecnia política, ni las redes sociales dan votos por arte de magia, son elementos que deben ir articulados con distintas estrategias, ya que los triunfos electorales son multifactoriales, donde el contacto directo con la gente y el territorio, es lo que genera más votos.

Por eso, como duranguenses responsables escuchemos a quienes en equipo defenderán a Durango verdaderamente, ya que la gente no quiere promesas, quiere resultados y acciones en su beneficio.

“Inicio de la guerra sucia: 31 días de campaña”



A 31 días de campaña electoral y del primer tercio de proselitismos de las y los candidatos al Senado de la República y de las diputaciones federales, se visualiza que el panorama político se va empañar por el inicio de la guerra sucia contra quienes en este momento han tenido un mayor acercamiento y contacto directo con los duranguenses.

No podemos dejar de lado, que tanto las y los candidatos de la alianza Fuerza y Corazón por México, Gina Campuzano, Gaby Hernández López, Paty Jiménez, Alejandra Terrones, Cristian Mijares y Sonia Flores; son hasta el momento los que más han recorrido las calles y regiones de Durango.

Sin embargo, lamentablemente, la guerra sucia parece destinada a intensificarse en el segundo tercio de la contienda. ¿El objetivo? Debilitar las fortalezas de aquello aspirantes con mayores posibilidades de triunfo en las urnas; la constante será la violencia política de género, ya que la mayoría de las candidaturas son encabezadas por mujeres.

Sin embargo, es crucial que tanto los contendientes como la ciudadanía mantengan su enfoque en las propuestas políticas. En medio de esta batalla de descalificaciones y estrategias cuestionables, es fácil perder de vista lo que realmente importa: las ideas y los proyectos que pueden impactar positivamente en la vida de los ciudadanos.

Es imperativo que la ciudadanía no se desmotive ante estas tácticas negativas y que provocan abstencionismo. En lugar de ceder al desaliento, debemos recordar nuestra responsabilidad como votantes de elegir a los mejores perfiles para representarnos. No nos dejemos influenciar por la manipulación en las redes sociales, recordando siempre que estas plataformas no otorgan votos directamente.

A medida que avanza la campaña, los candidatos deben mantener un debate constructivo, basado en ideas y propuestas, en lugar de sucumbir a la tentación de la desinformación y el ataque personal. Solo así podremos asegurar que las decisiones tomadas en las urnas reflejen verdaderamente la voluntad y los intereses de la ciudadanía.

Recordemos el caso de Gina Campuzano en 2021, cuando como candidata a la diputación federal fue víctima de ataques de violencia de género a través de la utilización de un perfil falso en redes sociales donde se utilizó su fotografía y nombre para vender un sillón del amor, situación que dañado su imagen; pero a la vez le permitió estar presente de manera mediática, por lo que más que perjudicarla se vio beneficiada por la estrategia fallida de sus adversarios políticos.

Sin embargo, este tipo de prácticas y descalificaciones serán el pan de cada día en el proceso electoral que estamos viviendo, donde se atacará, señalará o se minimizan las fortalezas de los aspirantes que tienen más posibilidades de ganar la elección el próximo 02 de junio.

En este sentido, todos los aspirantes a las senadurías, diputaciones locales y federales, deben enfocar sus esfuerzos en abordar temas sociales que verdaderamente interesan a la ciudadanía, ya que estamos cansados de escuchar las descalificaciones que muchos actores políticos utilizan como arma electoral.

Como ciudadanos, todos deseamos que no existan campañas de desprestigio entre los contendientes, pero también sabemos que es algo complicado; si embargo, sería lo más sano y positivo, para poder elegir a los mejores perfiles y las mejores propuestas legislativas.

Ojalá los spot y mensajes políticos que empezarán a incrementarse a partir del mes de abril a través de los diversos medios de comunicación y redes sociales, permitan a los ciudadanos tomar su mejor decisión y no solo generen dudas para tener unos dignos representantes en al Senado de la República y en las cámaras de diputados federales y locales.

No olvidemos que ni la mercadotecnia política, ni las redes sociales dan votos por arte de magia, son elementos que deben ir articulados con distintas estrategias, ya que los triunfos electorales son multifactoriales, donde el contacto directo con la gente y el territorio, es lo que genera más votos.

Por eso, como duranguenses responsables escuchemos a quienes en equipo defenderán a Durango verdaderamente, ya que la gente no quiere promesas, quiere resultados y acciones en su beneficio.