De los resultados electorales, hay algunos casos que causaron extrañeza porque perdieron los favoritos.
Por ejemplo: en Gómez Palacio todo parecía indicar que Marina Vitela se reelegiría a través de interpósita persona. Pero no, ganó Leticia Herrera.
En Durango, aunque hizo su berrinche Gonzalo Yáñez, siempre fue el favorito José Antonio Ochoa.
Sí fue sorpresiva la victoria de David Ramos en Guadalupe Victoria, pues el favorito era el Verde, Gerardo Villarreal.
Más sorpresiva fue la victoria de José Luis Covarrubias en el municipio de Hidalgo, pero el favorito era Javier Martínez Trujillo.
En Mapimí, el morenista Fernando Rivera, le ganó a la fémina encabezada por Martha Castro.
En Nazas, la minera Diana González dio cabal cuenta que quería repetir Socorro Palacios.
Gran sorpresa causó en Pánuco de Coronado la derrota de Gabriela García, a manos de un auténtico desconocido, Rogelio Flores Guerrero, dueño de un supermercado frente a la Plaza de Armas.
Gran sorpresa en San Pedro del Gallo la victoria de Salvador Carrasco, patrocinado por Movimiento Ciudadano.
En Tamazula, creo que imperará el fallo del Tribunal federal y que Napoleón Herrera se irá a su casa en El Durazno y al Palacio Municipal de la tierra de “El Plebe”, Ricardo Ochoa Beltrán, repetidor.
Otra sorpresa fue la derrota de Orlando Herrera en Vicente Guerrero, porque muestreaba más alto que su cuñada, que finalmente le ganó, cobijada por el Partido del Trabajo, Juana Acevedo Ibarra.
En San Juan de Guadalupe, nadie esperaba el triunfo de una simple ama de casa, Luz María Castañeda, patrocinada por Morena.
Y en San Juan del Río, una sorpresota así de grandota, la de Hugo Gándara Hurtado sobre la muy respetable dama Guadalupe González.
Ahí se según se dice, aunque Hugo era apenas conocido, lo jalaron los votos del ahora gobernador Esteban Villegas.
En Nuevo Ideal siempre se dio por un hecho la derrota del PAN, no es gran sorpresa que ganara Luis Gracia, patrocinado por Morena, pero la sorpresa es, cómo levantó la votación el médico Omar Nevárez.
Y en Rodeo, no hubo sorpresa con la victoria de la repetidora María de la Luz Amaya, patrocinada por el PRD.
Y por último, sorpresa enorme en Nombre de Dios, que Nancy Vázquez, que saliera tan repudiada como en su anterior oportunidad, le ganara al popular Juan Solís Ríos, que cuando fue presidente se le consideró entre los mejores.