Más de un mes ha transcurrido tras la apertura de los templos católicos en medio de la pandemia, donde se ha aplicado el protocolo sanitario, sin embargo se ha observado que muchas personas son renuentes al uso obligatorio del tapabocas y se niegan a cumplir con la sana distancia, reconoció el vocero de la Arquidiócesis de Durango, Noé Soto Valdez.
El presbítero reconoció que muchos fieles que asisten a misa son renuentes a cumplir con los protocolos de sanidad, en este caso a través de los equipos estratégicos que operan en cada templo se ofrece tapabocas para quienes no lo llevan.
Destacó que existe cierta renuencia a acatar estos protocolos, sin embargo cada equipo estratégico hace que se cumplan todas las medidas obligatorias para reducir el riesgo de contagios. Se les toma temperatura al entrar, existen tapetes sanitozantes y reciben gel antibacterial.
El vocero arquidiocesano estableció que está restringida la entrada a personas adultas mayores, de ahí que no se puede acceder el 25% de la capacidad en cada templo. Aunque aclaró que continúa la dispensa de la comulgación, es decir, que la iglesia entiende que quienes no puedan asistir no estén obligados a recibir este sacramento por motivos de la pandemia.
Asimismo manifestó que la peregrinación en honor a los Santos Mártires duranguenses que se tenía contemplada para realizarse este día14 de agosto, ha sido suspendida debido a la situación en la que se encuentra el mundo y será pospuesta para el 6 de febrero del año entrante, concluyó.